El cinco de este mes (abril) conmemoramos a la Santísima Virgen Mártir Ypomoní.
La Santísima Virgen Mártir Ypomoní* no figura oficialmente en el calendario de la Iglesia, sin embargo, es mencionada en el Códice 1104, folio 986, del Monasterio de Vatopaidi, donde se le dedica un Servicio completo que fue compuesto por Teófanes. El Canon tiene el acróstico: "τοὺς σοὺς ἀγῶνας, Ὑπομονή, θαυμάσω" ("Estoy asombrado, Ypomoni, por tus luchas").
Lo que podemos deducir de estos himnos es que Santa Ypomoní fue una virgen que dedicó su vida a Cristo, y por su confesión de fe en Él y su negativa a adorar a los ídolos durante una de las primeras persecuciones cristianas, fue sometida a torturas. Se menciona que hubo un intento de quemarla viva, pero el fuego actuó como rocío fresco y salió ilesa. También se nos informa de que fue atada y encarcelada, suspendida de un poste de madera y lacerada, y que algunas extremidades suyas fueron amputadas.
Todo lo que enfrentó, lo hizo con valentía y coraje y fue firme en su fe hasta el final, teniendo su corazón y su intelecto puestos en su amor por Cristo y en estar con su Esposo por la eternidad. No hay detalles exactos sobre cómo llegó a ser su final, pero parece que finalmente sucumbió a sus torturas. En un lugar se la conoce como una "Gran Mártir" por todo lo que soportó. También se nos informa que ella tiene el don de obrar sanaciones para aquellos que se acercan a ella con fe buscando sus intercesiones.
NOTA:
* Ypomoní, del gr "Υπομονή", traducido "paciencia". También se encuentra en ocasiones como Ipomoni o Hipómona
Apolytikion en el Cuarto Tono
Ornamento de mártires, milagrosa Ypomoní, por tu buen testimonio recibiste una corona, toda honorable atleta. Habiendo disuelto toda la astucia de Belial, levantaste al Salvador con tus valientes labores, y ahora intercedes ante el Señor en favor de aquellos que te honran.
Kontakion en Plagal del Cuarto Tono
Como campeón y con tu aguda aprensión, fuiste fortalecido por tu alianza con Cristo, y disputado con el poder de Cristo; pero como fuiste firme en tus luchas, ayúdanos con tus intercesiones, para que los que te honramos obtengamos la salvación.
Oikos
Concede a mi lengua claridad y a mi mente tu luz, Salvador vivificante, para entonar dignamente a tu resplandeciente cordero, que por tu testimonio se entregó a los tormentos, sin apegarse ni aun a sus miembros, y mostró su amor hacia ti hasta el fin; y nosotros por estas honrosas contiendas la honramos clamando con gozo: Alégrate muy disputada Virgen Mártir del Señor, cuya perseverancia es regla de ser varonilísima, renombradísima Ypomoní, tú que habitas en los cielos y te alegras con los santos, de una manera digna de tus trabajos, pero intercede para que nosotros que te honramos obtengamos la salvación.
Alégrate doncella parecida al sol la belleza de los mártires,
Alégrate dignidad de la fe que perseveró en la perseverancia,
Alégrate porque tu concurso edifica a los fieles,
Alégrate porque tu resistencia pisotea a los enemigos,
Alégrate gloria y jactate de tu patria y raza,
Alégrate por tu valentía es una invitación al concurso,
Alégrate doncella llamada por la constancia y la esperanza de los atletas,
Alégrate venerado emblema de monásticos y ascetas,
Alégrate aroma de la fe la fragancia de Cristo,
Alégrate de la exaltación y gloria de los que siempre luchan,
Alégrate apoyo y pilar de los que se muestran atletas,
Alégrate porque tu concurso trae alegría a la tierra y al cielo,
Alégrate porque preparas para la salvación a los que te honran.
Fuentes consultadas: saint.gr, johnsanidopoulos.com