Versos:
A los nueve mártires: "Nueve hombres mataron al enemigo
de Dios, convirtiéndose en amigos de Dios por la espada".
A María: "Recibe, oh Salvador, la sangre de mi
garganta, María declaró como cuando María se lamentó".
En este día conmemoramos a los Diez Santos Mártires, quienes
disputaron en nombre del santo icono de nuestro Salvador Jesucristo en la Puerta de Chalke: Julián,
Marciano, Juan, Santiago, Alexios, Demetrio, Fotios, Pedro, Leoncio y María la
Patricia.
Estos santos vivieron durante el reinado del salvaje León III
el Isaurio (717-741), quien condenó los iconos sagrados, los poniéndolos al fuego por esta
razón. Así, el Patriarca en ese momento, San Germanos, pasó
por muchas aflicciones y angustias del villano León, porque lo reprendió como
hombre impío y sin ley.
"Χάλκη Πύλη", [Jálki Píli], "Puerta de Bronce",
Gran Palacio de Constantinopla.
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Debido a que el salvaje buscó derribar el icono venerado de
nuestro Señor Jesucristo que fue solemnemente situado por encima de la Puerta
Chalke de Constantinopla, se construyeron grandes escaleras de madera para derribar el icono sagrado.
Cuando un soldado de un determinado rango (“el spatarios") subió con un
hacha dispuesto a acabar con el icono, los valientes atletas de Cristo se
anticiparon y agarraron una de las escaleras y la empujaron hacia sí mismos,
derribando así al soldado que estaba tratando de derribar el venerado icono.
Este soldado falleció, y al emperador impío le maldijeron y anatematizaron.
Cuando el emperador se enteró de esto, se llenó de ira, y
ordenó que todos los que se encontraran allí fueran decapitados, cuyo número
solo el Señor conoce, ya que era una gran multitud. A los nueve monjes ordenó
que fuesen golpeados con varas y luego encarcelados. Dio la orden de golpearles
entonces de, cada día, fustigarles con varas quinientas veces. Los bendecidos
soportaron estos golpes durante ocho meses.
Diez Santos Mártires en la Puerta de Bronce, Constantinopla. 9 de agosto |
Cuando el tirano vio cómo
aguantaban todo esto, ordenó quemar los rostros de los mártires con espetos
candentes y luego mandó que los decapitaran en el distrito de Kinegesion. Junto
con ellos ordenó que decapitaran a Santa María la Patricia, cuyos sagrados restos
fueran arrojados al mar, y de esta manera los santos mártires recibieron la
corona del concurso.
Fuentes consultadas: saint.gr, synaxarion.gr, es.qwerty.wiki,
archive.org, es.wikipedia.org, greek-language.gr, www.facebook.com/Bizancio-Maravillosa