domingo, 28 de abril de 2024

Domingo de Ramos

Este día celebramos la entrada solemne de Nuestro Señor en Jerusalén. Entonces Jesús, que venía de Betania, envió a a dos de sus discípulos y le trajeron un asno. Y se sentó sobre él, para entrar en la ciudad.

El pueblo, habiendo escuchado que Jesús venía, enseguida cogieron ramas de palmera y salieron a recibirle.
Otros con sus vestidos, otros con otras ramas de árboles, le abrieron camino para que Jesús pasase.
Y todos juntos, hasta los niños pequeños, clamaban: "Osana, bendito el que viene en el nombre del Señor, el rey de Israel". 
Cristo se adentra en la ciudad sentado sobre un asno. Los israelitas le reciben con honores como Rey. 
 
 
 



Domingo de Ramos. Pintura en pared de Iglesia
en Skete de Kafsokalibiton, s.XVIII. Monte Athos. 



 
 
 
Él no da mucha importancia a las alabanzas, no se limita a las solemnidades, a la gloria momentánea, y se dirige hacia la Cruz y la Resurrección.  
La entrada de Jesús en Jerusalén es finalmente la entrada al martirio en la vida terrenal del Señor. En pocos días será martirizado y ejecutado en la cruz, para matar a la muerte y regalar así la vida.
 


Homilía sobre la entrada del Señor a Jerusalén 

San Nikolai Velimirovich

Uno de los detalles más milagrosos de la vida de nuestro Salvador fue previsto por el profeta Zacarías a través del oscuro cristal del tiempo, y se describe así:

" El Rey de paz.  9.¡Alégrate con alegría grande, hija de Sión! ¡Salta de júbilo, hija de Jerusalén! He aquí que viene a ti tu rey; Él es justo y trae salvación, (viene) humilde, montado en un asno, en un borrico, hijo de asna".(Zacarías 9,9)

El apóstol Lucas, un testigo ocular, describe este evento: ver Capítulo 19, Vers. 28-44: "La entrada triunfal en Jerusalén". (LXX, Breve interpr. P. Trempelas) 
 
 
 








Esta es la descripción de un evento histórico que tuvo lugar hace veinte siglos, como lo relata un testigo ocular. Pero este evento tiene más que un significado histórico; también tiene un significado espiritual y, por lo tanto, también un significado moral para cada cristiano actual. Según el significado espiritual, Jerusalén significa el alma humana, y la entrada del Señor en Jerusalén significa la entrada de Dios en el alma.
 
 





 
 
 
Las multitudes de personas, amontonadas y empujadas unas contra otras, esperando y saludando alegremente a Cristo, simbolizan los nobles sentimientos y los pensamientos exaltados de una persona que saluda alegremente a Dios, su Salvador y Libertador. Los líderes de la multitud de personas, que odian a Cristo y quieren matarlo, personifican los deseos inferiores y los pensamientos terrenales, que toman la delantera sobre la noble naturaleza del hombre y la oprimen. Ahora, esta naturaleza humana inferior se rebela contra la entrada de Dios en el alma, porque cuando Dios está entronizado allí, la naturaleza inferior será inevitablemente destruida.
El Templo en Jerusalén simboliza el lugar santísimo del alma humana, ese lugar sagrado donde el Espíritu Santo tiene, aunque solo sea un refugio minúsculo, incluso en el más grande de los pecadores. Pero las pasiones terrenales también penetran allí, y la naturaleza humana inferior incluso la ha utilizado para lograr sus objetivos básicos.
 
 







 
Cristo sana el alma de aquellos enfermos que caen ante Él con fe, y esto significa que ciertos impulsos del alma, aunque están enfermos, tienen sed de unidad con Dios y le buscan a Él, el único Doctor verdadero en el mundo. La profecía de Cristo de la destrucción de Jerusalén simboliza la destrucción de cualquier alma que rechaza a Dios, le descarta y despide de sí mismo.
Nadie en este mundo está contento a menos que haya abierto las puertas de su Jerusalén espiritual, su alma, y ​​haya recibido a Dios en sí mismo. Un hombre sin Dios siente solo y desesperado. La sociedad de los demás no hace desaparecer su soledad, sino que solo la aumenta. Sin embargo, el que ha recibidodo a Dios en su alma nunca se sentirá solo ni siquiera en un desierto. Nadie muere una muerte eterna, excepto uno en quien Dios ha muerto. 
 









Se suelen celebrar el Domingo por la tarde los maitines del Lunes Santo, también llamados "Primer oficio del Novio"

Servicio Litúrgico del Domingo de Ramos









Ἀπολυτίκιον  (Κατέβασμα) Ἦχος δ’.
 
Συνταφέντες σοι διὰ τοῦ Βαπτίσματος, Χριστὲ ὁ Θεὸς ἡμῶν, τῆς ἀθανάτου ζωῆς ἠξιώθημεν τῇ Ἀναστάσει σου, καὶ ἀνυμνοῦντες κράζομεν· Ὠσαννὰ ἐν τοῖς ὑψίστοις, εὐλογημένος ὁ ἐρχόμενος, ἐν ὀνόματι Κυρίου.

 
 
Oh Cristo Dios, cuando fuimos sepultados contigo en el Bautismo; Por Tu Resurrección, hemos sido merecedores de la Vida Inmortal y alabándote exclamamos: “¡Hosanna en las Alturas, Bendito El que viene en el Nombre del Señor!”
 
 




Fuentes consultadas: saint.gr, acoantioquena.com, diakonima.gr, oca.org, pemptousia.gr, fatheralexander.org, orthodoxwiki.org, newsbomb.gr