jueves, 20 de abril de 2023

JUEVES DE PASCUA

Semana de Renovación (del gr. “Διακαινήσιμος Ἑβδομάς”), Semana Brillante (del ing. “Bright Week”), o Semana de Pascua o Pascual o es el nombre utilizado por la Iglesia Católica y Apostólica Ortodoxa* para el período de siete días que comienza en Pascua y continúa hasta (sin incluir) el domingo siguiente, que se conoce como Domingo de Tomás.



Reflexión para el Jueves de Pascua 

Por San Teófano el Recluso
 
Beneficiosa es la obra de los que, con la sensata razón, aplastan la enorme mentira que se esgrime contra la verdad de la Resurrección. Lee y ármate con esta razón; mientras tanto, no seáis demasiado perezosos para dejar cada vez más espacio para que entre en vosotros el poder de la Resurrección de Cristo. Cuanto más hagáis esto, más respiraréis el aire de la Resurrección, y estaréis bastante a salvo de todos los dardos del enemigo, que se dirigen contra esta verdad. Usted pregunta, ¿qué se necesita para esto? Nada especial: sé como debes ser según el voto que hiciste en el Santo Bautismo, que es nuestra resurrección. 









¿Escupiste a Satanás y todas sus obras? Así que continúa preservándote así en relación con él. ¿Te uniste a Cristo? Entonces quédate con Él. Las obras de la oscuridad y la luz son obvias. Huid de los primeros y haced toda diligencia con los segundos. Pero haced esto sin ningún compromiso, ni siquiera el más pequeño, para que la norma de vuestra vida sea la siguiente: no hay comunión de la luz con las tinieblas, ni de Cristo con Belial (cf. 2 Co 6, 15).



NOTA: 

* Utilizan la misma denominación otras incalculables ramificaciones existentes hoy en día, erróneamente autodenominadas “iglesias”, como las “católicas ortodoxas orientales”, las de “rito bizantino”, la “católica siro malabar” y “siro malankara”, la “greco-católica ucraniana y greco-católica rumana”, uniatas en general, y tantas otras sometidas a la gran ramera de Bablonia (v. Roma), con la cual "fornicaron los reyes de la tierra, y los habitantes de la tierra se embriagaron con el vino de su prostitución" (Ap. 17,2), a la cual le queda cada vez menos tiempo para su caída y condena.

Sólo los bautizados en la Una y Santa Iglesia Católica y Apostólica Ortodoxa continúan la revelación realizada por Jesús Cristo a los apóstoles.