Versos:
"Fuiste realmente un predicador de la luz brillante, una luz cuya fuente aporta esplendor al santuario más íntimo".
En este día conmemoramos a nuestro Santo Padre Gregorio, Arzobispo de Salónica, el Realizador de Milagros y Palamas, quien apareció prominentemente en 1340.
San Gregorio Palamás fue un gran teólogo y destacado orador y filósofo, uno de los mayores personajes de nuestra Iglesia. Nació en Constantinopla en 1296* y sus padres se llamaban Constantino, quien era Senador, y la respetadísima Kalloni, y eran practicantes de la "Oración del Corazón". Recibió una importante formación junto al profesor y teólogo Teodoro Metoquita.
El emperador Andrónico II Paleólogo apreció sus habilidades y le destinó a unos altos cargos estatales. Sin embargo, Gregorio no estaba de acuerdo con los planes del emperador porque amaba la vida solitaria y ascética de un hombre joven. Primero fue al Monte Papikio en Tracia y luego al Monte Athos, donde pasó varios años de su vida.
Fue Arzobispo de Salónica (1347-1359) durante un periodo muy agitado para nuestra Iglesia, durante el cual el peligro de la transgresión de la verdad fue grande y la espiritualidad ortodoxa peligraba de ser invadida por la Escolástica occidental. Su defensa de la verdad creó esta gran figura espiritual. Incluso desde su puesto como arzobispo vivió como un asceta.
"Fuiste realmente un predicador de la luz brillante, una luz cuya fuente aporta esplendor al santuario más íntimo".
En este día conmemoramos a nuestro Santo Padre Gregorio, Arzobispo de Salónica, el Realizador de Milagros y Palamas, quien apareció prominentemente en 1340.
San Gregorio Palamás fue un gran teólogo y destacado orador y filósofo, uno de los mayores personajes de nuestra Iglesia. Nació en Constantinopla en 1296* y sus padres se llamaban Constantino, quien era Senador, y la respetadísima Kalloni, y eran practicantes de la "Oración del Corazón". Recibió una importante formación junto al profesor y teólogo Teodoro Metoquita.
El emperador Andrónico II Paleólogo apreció sus habilidades y le destinó a unos altos cargos estatales. Sin embargo, Gregorio no estaba de acuerdo con los planes del emperador porque amaba la vida solitaria y ascética de un hombre joven. Primero fue al Monte Papikio en Tracia y luego al Monte Athos, donde pasó varios años de su vida.
Fue Arzobispo de Salónica (1347-1359) durante un periodo muy agitado para nuestra Iglesia, durante el cual el peligro de la transgresión de la verdad fue grande y la espiritualidad ortodoxa peligraba de ser invadida por la Escolástica occidental. Su defensa de la verdad creó esta gran figura espiritual. Incluso desde su puesto como arzobispo vivió como un asceta.
San Gregorio Palamás el Milagroso, Arzobispo de Tesalónica |
En 1335 con los dos logos demostrativos "Sobre la procedencia del Espíritu Santo", entró en conflicto con Barlaam Calabro, quien defendía que el hombre no puede conocer a Dios, y aún más no puede unirse a Él.
Según Barlaam, Dios está "cerrado en sí mismo" y no puede unirse con los hombres. Por lo tanto, los monjes "hesicastas" (del gr. "ησυχαστές", [isijastés]) ** no eran ortodoxos, sino heréticos ("mesalianistés") y eran calificados con el apodo despectivo de "omfaloskópos"***. Su conflicto con San Gregorio fue terrible y causó una tormenta espiritual, similar a la iconoclasia.
Después de estas posiciones de Barlaam, Palamas se instaló en Salónica, donde comenzó la lucha "por los Santos Hesicastas"; es decir, aquellos que practicaban el Hesicasmo, así como estableciendo por escrito su defensa. La cuestión de esta lucha fue principalmente la participación o no de la esencia divina.
Después de estas posiciones de Barlaam, Palamas se instaló en Salónica, donde comenzó la lucha "por los Santos Hesicastas"; es decir, aquellos que practicaban el Hesicasmo, así como estableciendo por escrito su defensa. La cuestión de esta lucha fue principalmente la participación o no de la esencia divina.
"Ό ΆΓΙΟΣ ΓΡΗΓΌΡΙΟΣ Ο ΠΑΛΑΜΆΣ", [Ó Áyios Grigórios o Palamás], EL SANTO GREGORIO PALAMÁS |
Gregorio, armado con una gran formación y un gran criterio de las Sagradas Escrituras, distinguió entre la esencia divina de las energías creadas e increadas. Y esto lo apoyó de acuerdo con el espíritu de los Padres, y la Iglesia ratificó su interpretación con cuatro Sínodos. En el último de ellos, que se celebró en Constantinopla en 1351 d.C., estuvo el mismo Palamás.
El santo Gregorio escribió muchas otras obras teológicas con distinta temática, alrededor de 60. Más tarde, el Patriarca Isidoro le eligió en un principio como obispo de Tesalónica. Sin embargo, debido a las condiciones de entonces, se fue temporalmente a Limnos, asumiendo después sus deberes. Entregó su alma al Señor en el año 1360 d.C. y fue inmediatamente honrado como Santo.
El patriarca Philotheos escribió en 1376 un glorioso discurso a Gregorio Palamás, junto con una secuencia (servicio eclesiástico con himnos y oraciones en su honor) y determinó la celebración de su memoria en el Segundo Domingo de la Gran Cuaresma.
Su Venerado cuerpo, tras su entierro, permaneció incorrupto, despidiendo un aroma celestial realizando milagros.
El santo Gregorio escribió muchas otras obras teológicas con distinta temática, alrededor de 60. Más tarde, el Patriarca Isidoro le eligió en un principio como obispo de Tesalónica. Sin embargo, debido a las condiciones de entonces, se fue temporalmente a Limnos, asumiendo después sus deberes. Entregó su alma al Señor en el año 1360 d.C. y fue inmediatamente honrado como Santo.
El patriarca Philotheos escribió en 1376 un glorioso discurso a Gregorio Palamás, junto con una secuencia (servicio eclesiástico con himnos y oraciones en su honor) y determinó la celebración de su memoria en el Segundo Domingo de la Gran Cuaresma.
Su Venerado cuerpo, tras su entierro, permaneció incorrupto, despidiendo un aroma celestial realizando milagros.
San Gregorio Palamás el Milagroso. 14 de Noviembre. |
Para los latinos súbditos del Papa sin embargo
, era una gran espina el recuerdo del Santo, y más aún si cabe con su cuerpo completo e incorrupto despidiendo un aroma celestial. Por eso muchas veces fue falsamente acusado de que debido a sus pecados se mantuvo "sin deteriorarse", no aceptando la tierra recibirlo, rechazándolo y negándose a "disolverlo completamente". En el siglo XIX d.C. el templo del santo fue devastado por el fuego y sus santas reliquias se quemaron, dejando solo los huesos intactos.
Tal era la obstinación de los romano-católicos que cuando se imprimieron los servicios eclesiásticos en Venecia, durante los años de la turcocracia (gobierno otomano), el Dux sólo daba su permiso para la publicación, si no había ninguna referencia al Santo. Así, después de unos años de circularon de los impresos en Venecia, la memoria del Santo fue casi olvidada. A mediados y finales del siglo XX, se recuperó la memoria de sus grandes luchas y tomó el lugar adecuado en el lugar de la Iglesia Ortodoxa.
El significado de Gregorio Palamas para la Ortodoxia,
Tal era la obstinación de los romano-católicos que cuando se imprimieron los servicios eclesiásticos en Venecia, durante los años de la turcocracia (gobierno otomano), el Dux sólo daba su permiso para la publicación, si no había ninguna referencia al Santo. Así, después de unos años de circularon de los impresos en Venecia, la memoria del Santo fue casi olvidada. A mediados y finales del siglo XX, se recuperó la memoria de sus grandes luchas y tomó el lugar adecuado en el lugar de la Iglesia Ortodoxa.
El significado de Gregorio Palamas para la Ortodoxia,
por el Metropolitano Hierotheos Vlachos de Lepanto. (San Gregorio Palamás como Hagiorita, extractos de Caps. 1 y 13)
Podemos ver claramente el gran significado de su enseñanza para la ortodoxia en la importante cuestión de la epistemología. Cuando decimos epistemología nos referimos al conocimiento de Dios y, para ser precisos, nos referimos a la forma en que perseguimos para alcanzar el conocimiento de Dios. La situación en la época de San Gregorio era que la ortodoxia estaba siendo degradada; se estaba volviendo mundana y se transformaba en panteísmo o agnosticismo. El panteísmo creía y enseñaba que Dios en su esencia se encontraba en toda la naturaleza, por lo que cuando miramos la naturaleza podemos adquirir conocimiento de Dios. El agnosticismo creía y enseñaba que era completamente imposible para nosotros conocer a Dios, solo porque Él es Dios y el hombre es limitado, y por lo tanto el hombre era completamente incapaz de alcanzar un verdadero conocimiento de Dios.
Ante este gran peligro, San Gregorio Palamas desarrolló la enseñanza fundamental de la Iglesia sobre el gran misterio de la distinción indivisible entre la esencia y la energía de Dios. Debemos subrayar que esta no es la enseñanza de San Gregorio Palamas solo, sino de la Iglesia Ortodoxa, y por lo tanto esta teología no puede llamarse Palamismo. Muchos padres se han referido a la distinción entre esencia y energía. Lo encontramos en la Biblia, en los primeros Padres Apostólicos, en los Padres Capadocios, y especialmente en Basilio el Grande y ese gran teólogo dogmático de la Iglesia, San Juan de Damasco (Damasceno). San Gregorio Palamás, con su destacada habilidad teológica, desarrolló aún más esta enseñanza ya existente y presentó sus consecuencias prácticas y sus dimensiones.
Es muy característico que esta distinción comenzó a notarse en las discusiones sobre el Espíritu Santo. El filósofo calabrés Barlaam sostuvo que no podíamos saber qué es el Espíritu Santo. Ante el peligro del agnosticismo, San Gregorio Palamas enseñó que la procesión real del Espíritu Santo por parte del Padre es algo diferente de ser enviado por el Hijo. Por lo tanto, aunque no conocemos la esencia del Espíritu Santo, sí conocemos su energía.Toda vida espiritual es un resultado y fruto de la energía del Espíritu Santo. Por lo tanto, enseñaba el santo, no podemos participar en la esencia de Dios, pero podemos conocer y participar en sus energías. Como enseña el gran teólogo dogmático San Juan de Damasco, podemos ver Sus tres uniones: la unión en esencia, de las Personas de la Santísima Trinidad; unión en sustancia, en la Persona de Cristo entre las naturalezas divina y humana; y unión en energía, entre Dios y el hombre.
Podemos ver claramente el gran significado de su enseñanza para la ortodoxia en la importante cuestión de la epistemología. Cuando decimos epistemología nos referimos al conocimiento de Dios y, para ser precisos, nos referimos a la forma en que perseguimos para alcanzar el conocimiento de Dios. La situación en la época de San Gregorio era que la ortodoxia estaba siendo degradada; se estaba volviendo mundana y se transformaba en panteísmo o agnosticismo. El panteísmo creía y enseñaba que Dios en su esencia se encontraba en toda la naturaleza, por lo que cuando miramos la naturaleza podemos adquirir conocimiento de Dios. El agnosticismo creía y enseñaba que era completamente imposible para nosotros conocer a Dios, solo porque Él es Dios y el hombre es limitado, y por lo tanto el hombre era completamente incapaz de alcanzar un verdadero conocimiento de Dios.
Ante este gran peligro, San Gregorio Palamas desarrolló la enseñanza fundamental de la Iglesia sobre el gran misterio de la distinción indivisible entre la esencia y la energía de Dios. Debemos subrayar que esta no es la enseñanza de San Gregorio Palamas solo, sino de la Iglesia Ortodoxa, y por lo tanto esta teología no puede llamarse Palamismo. Muchos padres se han referido a la distinción entre esencia y energía. Lo encontramos en la Biblia, en los primeros Padres Apostólicos, en los Padres Capadocios, y especialmente en Basilio el Grande y ese gran teólogo dogmático de la Iglesia, San Juan de Damasco (Damasceno). San Gregorio Palamás, con su destacada habilidad teológica, desarrolló aún más esta enseñanza ya existente y presentó sus consecuencias prácticas y sus dimensiones.
Es muy característico que esta distinción comenzó a notarse en las discusiones sobre el Espíritu Santo. El filósofo calabrés Barlaam sostuvo que no podíamos saber qué es el Espíritu Santo. Ante el peligro del agnosticismo, San Gregorio Palamas enseñó que la procesión real del Espíritu Santo por parte del Padre es algo diferente de ser enviado por el Hijo. Por lo tanto, aunque no conocemos la esencia del Espíritu Santo, sí conocemos su energía.Toda vida espiritual es un resultado y fruto de la energía del Espíritu Santo. Por lo tanto, enseñaba el santo, no podemos participar en la esencia de Dios, pero podemos conocer y participar en sus energías. Como enseña el gran teólogo dogmático San Juan de Damasco, podemos ver Sus tres uniones: la unión en esencia, de las Personas de la Santísima Trinidad; unión en sustancia, en la Persona de Cristo entre las naturalezas divina y humana; y unión en energía, entre Dios y el hombre.
De esta manera, San Gregorio preserva la verdadera enseñanza de la Iglesia. Si en tiempos de Atanasio el Grande, los hombres dudaban de la divinidad de Cristo, en tiempos de San Gregorio tenían dudas sobre las energías de Dios. Decían que sus energías son creadas. Por eso en el himno de despedida (apolitiquio) del santo cantamos: "Iluminador de la Ortodoxia, partidario y maestro de la Iglesia, belleza espiritual de los monásticos, campeón irrefutable de los teólogos ...".
La mente común de la Iglesia reconoce a San Gregorio Palamás, el santo Hagiorita (Agion Oros, o Monte Athos), como un gran Padre de la Iglesia, un maestro ecuménico, y lo incluye con los Tres Jerarcas y los tres grandes teólogos de la Iglesia. La caracterización del teólogo que se le ha dado, lo ha convertido en miembro electo de la compañía de los Santos Padres. San Gregorio es verdaderamente "un campeón invencible de los teólogos".
Pero también sinódicamente, la Iglesia lo ha caracterizado como un padre infatigable, maestro y teólogo. El Tomo sinodal de 1347 se refiere a este gran santo Hagiorita, diciendo:
La mente común de la Iglesia reconoce a San Gregorio Palamás, el santo Hagiorita (Agion Oros, o Monte Athos), como un gran Padre de la Iglesia, un maestro ecuménico, y lo incluye con los Tres Jerarcas y los tres grandes teólogos de la Iglesia. La caracterización del teólogo que se le ha dado, lo ha convertido en miembro electo de la compañía de los Santos Padres. San Gregorio es verdaderamente "un campeón invencible de los teólogos".
Pero también sinódicamente, la Iglesia lo ha caracterizado como un padre infatigable, maestro y teólogo. El Tomo sinodal de 1347 se refiere a este gran santo Hagiorita, diciendo:
"Pero también, si alguien más es sorprendido pensando o diciendo o escribiendo en contra del hieromonje más digno Gregorio Palamás y los monjes con él, o más bien en contra de los santos teólogos y esta Iglesia, ambos votamos en contra de él por estas cosas y le sometemos a esta condena, ya sea de la jerarquía o de los laicos. Muchas veces hemos proclamado como muy digno a este respetado sacerdote Gregorio Palamás y los monjes están de acuerdo con él. Ellos no escriben ni piensan nada que difiera de las palabras divinas, después de haber examinado ellos y los entendieron exactamente.
Y defienden las palabras divinas, o más bien nuestra devoción y tradición común en todos los sentidos, como es apropiado, defendiéndolos como en todos los aspectos superiores a lo que no solo ellos sino también la Iglesia de Dios y el antiguo sinodal volumen consideramos sofismas. Y también los declaramos defensores muy seguros de la Iglesia y su fe, y sus campeones y ayudantes ".
Este texto sinodal destaca las tres verdades siguientes que todos los cristianos deberían reconocer. Primero, San Gregorio Palamas se caracteriza por ser un maestro simple y seguro de la Iglesia. En segundo lugar, la enseñanza de San Gregorio sobre la distinción de esencia y energía, sobre la paridad del hombre.
En segundo lugar, la enseñanza de San Gregorio sobre la distinción entre esencia y energía, sobre la participación del hombre en la energía no creada de Dios y sobre la forma de vida vacilante es una enseñanza de la Iglesia y un canon de piedad y vida. En tercer lugar, cualquier persona que niegue e infravalore a San Gregorio Palamás, así como la vida hesicasta que vivió y enseñó, es excomulgado de la Iglesia Ortodoxa.
Todas estas cosas muestran el gran valor de San Gregorio, pero también el valor de la Montaña Sagrada, con su tradición hesicastica, preservada hasta nuestros días por los Padres Hagioritas. Esta tradición de hesicasmo es el mayor tesoro de la Montaña Sagrada, una esperanza para el mundo y una verdadera vida para los cristianos.
El rechazo de la Montaña Sagrada y la tradición hesicastica es en realidad una negación de la Tradición Ortodoxa y un alejamiento de la "Iglesia Una, Santa, Católica y Apostólica".
NOTAS:
* En la mayoría de los sinaxarios se dice que la fecha de su nacimiento es desconocida. S. Eustratiadis, sin embargo, menciona que San Gregorio nació en Constantinopla en 1296 d.C., aunque sin embargo sabemos que en la primera mitad del siglo XIV d.C. se encontraba en la corte imperial de Constantinopla.
** Hesicastas, es decir, aquellos que decían que si el hombre tiene un corazón puro y está concentrado en la "oración del corazón" ("Señor Jesucristo, Hijo de Dios, ten piedad de mí, pecador"), puede unirse con Dios y ser iluminado y ver la luz Increada, sin importar su formación y su educación.
** Hesicastas, es decir, aquellos que decían que si el hombre tiene un corazón puro y está concentrado en la "oración del corazón" ("Señor Jesucristo, Hijo de Dios, ten piedad de mí, pecador"), puede unirse con Dios y ser iluminado y ver la luz Increada, sin importar su formación y su educación.
*** "Omfaloskópos", (del gr. "ομφαλοσκόπους", "mirada en el ombligo"), como alusión irónica al esfuerzo de los hesicastas que al pronunciar la Oración de Jesús inclinaban la cabeza y fijaban su mirada en el ombligo, o más bien en el medio del cuerpo, para facilitar la “vuelta del entendimiento ( "νους", nus) al corazón. También son conocidos como "onfalópsicos" ("ομφαλόψυχος", [omfalópsijos]): literalmente, “alma-ombligo”.
Servicio eclesiástico a San Gregorio Palamás. (.pdf, griego)
Ἀπολυτίκιον Ἦχος πλ. δ’. (Κατέβασμα)
Ὀρθοδοξίας ὁ φωστήρ, Ἐκκλησίας τὸ στήριγμα καὶ διδάσκαλε, τῶν Μοναστῶν ἡ καλλονή, τῶν θεολόγων ὑπέρμαχος ἀπροσμάχητος, Γρηγόριε θαυματουργέ, Θεσσαλονίκης τὸ καύχημα, κῆρυξ τῆς χάριτος, ἱκέτευε διὰ παντός, σωθῆναι τὰς ψυχὰς ἡμῶν.
Apolitiquio tono pl. del 4ºὈρθοδοξίας ὁ φωστήρ, Ἐκκλησίας τὸ στήριγμα καὶ διδάσκαλε, τῶν Μοναστῶν ἡ καλλονή, τῶν θεολόγων ὑπέρμαχος ἀπροσμάχητος, Γρηγόριε θαυματουργέ, Θεσσαλονίκης τὸ καύχημα, κῆρυξ τῆς χάριτος, ἱκέτευε διὰ παντός, σωθῆναι τὰς ψυχὰς ἡμῶν.
¡Oh Astro de la Ortodoxia, firmeza de la Iglesia y maestro;hermosura de los ascetas, irrefutable campeón de los teólogos,Gregorio el milagroso, orgullo de Tesalónica y predicador de la Gracia:intercede por la salvación de nuestras almas!
Κοντάκιον Ἦχος πλ. δ’. Τῇ ὑπερμάχῳ.
Τὸ τῆς σοφίας ἱερὸν καὶ θεῖον ὄργανον Θεολογίας τὴν λαμπρὰν συμφώνως σάλπιγγα Ἀνυμνοῦμέν σε Γρηγόριε θεορρῆμον. Ἀλλ’ ὡς νοῦς νοΐ τῷ πρώτῳ παριστάμενος, Πρὸς αὐτὸν τὸν νοῦν ἡμῶν Πάτερ ὁδήγησον, Ἵνα κράζωμεν, χαῖρε κῆρυξ τῆς χάριτος.
Condaquio tono pl. del 4º
Santo y divino instrumento de la sabiduría, alegre trompeta de la teología, con un solo acuerdo cantamos tus alabanzas, oh Gregorio inspirado de Dios. Pero como ahora estás en "nous" y espíritu ante el "Nous" original, guía el nuestro hacia Él, el Padre, para que podamos clamarte: Alégrate, predicador de la gracia.
Oikos tono pl. del 2º
Apareciste en la tierra como un mensajero angelical, proclamando los misterios de Dios a los hombres mortales. Dotado de un intelecto humano y carne, pero hablando con la voz de los poderes sin cuerpo, nos has llenado de asombro, oh santo inspirado por Dios, y por lo tanto nos lleva a clamarte:
Alégrate, porque a través de ti la oscuridad se disipa;
Alégrate, porque a través de ti la luz ha regresado.
Alégrate, mensajero de la Divinidad no creada;
Alégrate, reprobador de la locura creada.
Alégrate, altura imposible de escalar, que habla de la naturaleza de Dios;
Alégrate, profundidad difícil de escanear, que habla de su energía.
Alégrate, porque has proclamado correctamente la gloria de Dios;
Alégrate, porque has denunciado las opiniones de los malhechores.
Alégrate, antorcha que nos muestra el sol;
Alégrate, copa llena de néctar.
Alégrate, porque a través de ti la verdad ha brillado;
Alégrate, porque a través de ti la falsedad se ha sumido en la oscuridad.
¡Alégrate, predicador de la gracia!
Fuentes consultadas: summa.upsa.es, fatheralexander.org, logosortodoxo.com, cristoesortodoxo.com, saint.gr, pemptousia.gr, aktines.blogspot.com, imverias.gr, rae.es