lunes, 4 de septiembre de 2023

Santo Mártir el Maestro Babila de Nicodemia y sus 84 discípulos martirizados con él (+298)

Cuando el rey Maximiano estuvo en Nicomedia y persiguió a los cristianos en el año 298 d.C., los cristianos se ocultaron ​​por temor. Entonces uno de los idólatras se dirige al emperador, diciéndole:


"Rey, en una cámara (estancia) oculta, bajo el suelo, hay un anciano llamado Babila (o Babilá), y él enseña a los necios niños cristianos, a respetar al crucificado, a despreciar a los dioses." Fueron enviados Entonces fueron enviados soldados junto con él, y fueron donde el maestro Babila y sus discípulos, siendo el número de ochenta y cuatro.
Llevados ante Maximiano, le pregunta éste a Babila: ¿Por qué, viejo, estás tan equivocado, y crees en un muerto viviente, a quien los judíos han crucificado? ¿Por qué no adoras a los dioses, a quienes adora toda la tierra habitada? ¿O te ríes de los niños de los necios cristianos y les enseñas a no adorar a los dioses? El Santo respondió: los dioses de las naciones, rey, son demonios. Nuestro Dios, creó los cielos. Tú y los griegos contigo, al ser ciegos, no véis la verdad.
Tras escuchar esto el rey, se encendió de ira. Acto seguido ordenó a cuatro soldados golpear al Santo con piedras en las mejillas, en los costados y en las piernas. Y cuando el Santo ve que de su cuerpo comienza a llenarse de sangre, voceó: "¡Gloria a Tí, Señor, que a mí, un anciano y débil, me has mostrado más fuerte que el rey joven y fuerte.





Iglesia de Cora, hoy hecha museo por los turcos.


 
Los soldados entonces con las piedras le partieron los tobillos y los hombros. Continuaron con el resto de articulaciones, desfigurándole, y poniéndole finalmente pesadas cadenas en el cuello. Pusieron sus pies en un madero de castigo y le encerraron en la cárcel.
Después comenzó el rey a adular a los ochenta y cuatro chicos, invitándoles a ofrecer sacrificios a los ídolos. En principio los discípulos de Babila no se niegan completamente, sino que comienzan a menudo a mirarse los unos a los otros. Diferenciando de entre todos ellos a diez, los más mayores de edad, les dice: vosotros, hijos, como prudentes que sois, convenceros de mis palabras y ofreced sacrificios a los ídolos. Y así podréis estar conmigo en el palacio y disfrutar de muchos bienes.
Dos de ellos, llamados Amonio ("Aμμώνιος") y Donato ("Δονάτος"), le dicen al rey: nosotros somos fieles cristianos, y por esto no queremos ofrecer nunca sacrificios a demonios sordos y mudos.
Debido a estas palabras, son golpeados por los soldados los corderos de Cristo. Magullados, voceaban más fuerte y más valientemente voceaban sin parar: Cristianos somos, y no ofrecemos sacrificios. Entonces el rey se gira hacia los otros chicos y les dice: y vosotros ofreced sacrificios, para que no os pase algo peor.
 


Martirio del Santo Hieromártir Babila  y de los niños con él.


 
 
Enseguida, ellos vocearon: somos cristianos, y no ofrecemos sacrificios. Y que seáis malditos tú y tus dioses. Entonces ordenó el rey que fuesen golpeados fuertemente y encerrados en prisión. Y que no se les diese ni pan, dejándoles morir de hambre allí.
Después ordenó que Babila fuese colgado, y que fuese azotado con venas de buey. Preguntó luego a cada niño, si quizás negaban a Cristo y a su maestro.
Debido a que no lo hicieron, el tirano ordenó que fuesen asesinados a espada, tanto los chicos como su maestro.
Yendo entonces el Santo con sus ochenta y cuatro discípulos, hasta el lugar de la ejecución, salmodiaban tranquilamente con gran entusiasmo; " He aquí, yo y los hijos que Dios me dio." (Hebreos, 2,13). Entonces el divino Babilonia fue decapitado primero, según el mandato del rey. A continuación, fueron también decapitados.
Algunos cristianos viniendo por la noche, pusieron las reliquias de los santos en un pequeño barco bote y las llevaron a Constantinopla. Y allí poniéndoles en tres cofres, los enterraron fuera de los muros de la ciudad en la parte norte, donde está el Monasterio llamado Cora.


NOTA:

En el día de hoy celebra también el Hieromártir Babila junto con otros tres niños martirizados con él. Lógicamente, se trata de otro caso.



Apolitiquio tono 4º

Siendo no solo participante de la vida de los Apóstoles, sino también su sucesor en el trono, tu que eres inspirado de Dios, encontraste tu obra por ascender a la contemplación. Por eso, repartiendo rectamente la palabra de la verdad, tu has sufrido hasta la sangre, Hieromártir Babilas, intercede ante Cristo Dios para que salve nuestras almas.

Condaquio tono 1º

En el sacerdocio te distinguiste grandemente, y completaste el camino del martirio. Extinguiste la adoración de ídolos y te hiciste campeón para tu rebaño, tu que eres divinamente sabio; por eso, venerándote, te clamamos místicamente, redímenos de los peligros por tus intercesiones, renombrado Babila.







Fuentes consultadas: saint.gr, apostoliki-diakonia.gr, pemptousia.gr, Sinaxario de los doce meses del año de de San Nicodemo el Athonita, diakonima.gr, synaxarion.gr