martes, 27 de agosto de 2024

San Fanurio, Megalomártir

Versos:
"Fanourio ilumina a todos los fieles, a pesar de que yació en la oscuridad de la tierra".
El 27 de agosto, se conmemora al Santo, Glorioso y Gran Mártir Fanourio, el recién revelado.

San Fanurio es uno de los santos más queridos por pueblo griego, que cada año honra y celebra su memoria el 27 de agosto.
El conocimiento de este tan querido santo podría describirse sin lugar a dudas como un don de Dios, porque fue desconocido por muchos siglos. Se hizo conocido a partir del descubrimiento accidental del icono en el siglo XIV d.C. en Rodas.
Mientras excavaban sobre unas antiguas casas para reforzar el lugar en la parte sur de la antigua muralla, descubrieron una iglesia muy hermosa, que estaba parcialmente enterrada en ruinas. Continuaron excavando hasta el suelo del templo, y encontraron muchos iconos sagrados, todos en muy mal estado, pero un icono de San Fanurio estaba completo y muy bien conservado; de hecho, parecía como si hubiera sido pintado ese mismo día. Y cuando este  templo fue descubierto junto con sus sagrados iconos, el entonces metropolita de Rodas Nilo II el Diasporinos (1355-1369 d.C.), un hombre de gran santidad y conocimiento, vino y leyó la inscripción del icono, que decía: "El Santo Fanurio " 
En el icono, el Santo estaba representado como un joven soldado, sosteniendo en su mano derecha una cruz, sobre la cual había una vela encendida, rodeada de doce imágenes de la vida del Santo.
 




Icono de San Fanurio, encontrado en perfecto estado por
el Metropolita Nilo II el Diasporinos en Rodas, Grecia




Alrededor del perímetro del icono había doce escenas, que mostraban al Santo siendo interrogado ante el magistrado; luego en medio de los soldados, que lo golpeaban en la boca y la cabeza con piedras; luego se tendió en el suelo mientras los soldados lo azotaban; luego, desnudos mientras ellos rasgaban su carne con ganchos de hierro; luego encarcelado en una mazmorra; y otra vez de pie ante el tribunal del tirano; luego siendo quemado con velas; luego atado a un poste; luego arrojado en medio de bestias salvajes; luego aplastado por una gran roca; luego de pie frente a ídolos sosteniendo brasas en sus manos, mientras un demonio cercano lloraba y se lamentaba; y finalmente se le muestra erguido en medio de un horno de fuego, con sus manos elevadas hacia el Cielo.
A partir de estas doce escenas representadas en el icono, metropolita dedujo que se trataba de una gran mártir santo. Entonces, en seguida, ese hombre bueno y piadoso envió delegaciones a los gobernantes de ese lugar, pidiéndole que le dieran ese templo para la restauración, pero se negaron a hacerlo. Por lo tanto, el jerarca viajó sólo a Constantinopla y allí obtuvo un decreto que lo facultaba para reconstruir la iglesia; por lo tanto, se restauró llegando a un estado en el que se puede ver incluso hasta el día de hoy, fuera de la ciudad. Y se ha convertido en la fuente de muchos milagros, de los cuales se relata uno a continuación.
 
 









En aquel momento la isla de Creta no tenía jerarca ortodoxo, sino un obispo latino, ya que estaba gobernado por los venecianos, quienes se habían negado astutamente a permitir que un jerarca ortodoxo fuera consagrado cada vez que uno moría. Esto lo hicieron con malas intenciones, pensando que con el tiempo podrían convertir a los ortodoxos a las doctrinas papales. Si los hombres ortodoxos deseaban obtener la ordenación, tenían que ir a Citera
Sucedió que salieron de Creta tres diáconos, viajando a  dicha isla para ser ordenados sacerdotes por el jerarca allí; cuando esto ya se había logrado, y volvían a su propia tierra, los sarracenos (musulmanes del lugar) los capturaron en el mar y los llevaron a Rodas, donde los vendieron como esclavos a otros sarracenos. Los sacerdotes recién consagrados lamentaban su infortunio día y noche.
Pero en Rodas, oyeron hablar de las grandes maravillas relizadas por el Gran Mártir Fanourio, y al instante hicieron fervientes súplicas al Santo, implorándole con lágrimas que los liberara de su amarga esclavitud. Y esto lo hicieron cada uno por separado, sin saber lo que los demás estaban haciendo, ya que cada uno había sido vendido a un amo diferente. Después, por la providencia de Dios, sus tres amos les permitieron a todos ir y adorar en el templo del Santo; y, guiados por Dios, vinieron todos juntos y se postraron ante el icono sagrado del Santo, regando el suelo con lágrimas, rogándole que los liberase de las manos de los Sarracenos. 
 
 



Iglesia de San Fanurio en la isla de Rodas, Grecia




Esa noche se apareció a los Sarracenos amos de los sacerdotes cautivos, y les ordenó que permitieran a los siervos de Dios ir y adorar en su templo para que no padeciesen una terrible destrucción. Pero los sarracenos, pensando que era brujería, los ataron con cadenas y les aplicaron mayores tormentos.
Entonces el Megalomártir Fanourio fue a ellos esa noche y los liberó de sus ataduras, y los animó, diciendo que al día siguiente los liberaría. Luego se apareció a los hagarenos y, reprochándolos con severidad, dijo: "Si mañana no ponéis en libertad a tus siervos, veréis el poder de Dios". Diciendo esto, el santo desapareció. Y sucedió que todos los que habitaban en esas casas, todos se levantaron ciegos y paralizados, atormentados con  terribles dolores, los amos con los más grandes. Pero, aunque postrados en cama, con la ayuda de sus parientes consideraron qué hacer, y finalmente decidieron liberar a los cautivos. Y cuando los tres sacerdotes llegaron donde ellos, les preguntaron si podían sanarlos de su enfermedad, y respondieron: "Suplicaremos a Dios. Hágase su voluntad ". 
 
 










Pero el Santo se apareció nuevamente a los Sarracenos en la tercera noche y les dijo: 'Si no envían a mi casa cartas de manumisión (liberación) para los sacerdotes, no tendrán la salud, ni la luz [de la vista] que desean. ' Y cuando volvieron a consultar con sus parientes y amigos, cada uno escribió una carta de emancipación para su propio esclavo, que fueron puestas detrás del ícono del Santo. Y sucedió el milagro,  incluso antes de que los mensajeros enviados al templo regresaran, aquellos que antes estaban ciegos y paralizados, fueron sanados; y maravillados liberaron a los sacerdotes y los enviaron a su patria de manera amistosa. Los sacerdotes, sin embargo, tenían una copia del icono de San Fanourios pintado y se lo llevaron con ellos a su propio país, y cada año el recuerdo del santo es piadosamente celebrado entre ellos. 
Por las oraciones del Mártir, que Cristo Dios tenga misericordia de nosotros. ¡Amén!

Himno Akathisto a San Fanurio
 
 
 
 
 


 
 
Ἀπολυτίκιον  (Κατέβασμα) Ἦχος δ΄. Ταχὺ προκατάλαβε.
 
Οὐράνιον ἐφύμνιον, ἐν γῇ τελεῖται λαμπρῶς, ἐπίγειον πανήγυριν νῦν ἑορτάζει φαιδρῶς, ἀγγέλων πολίτευμα· ἄνωθεν ὑμνῳδίαις εὐφημοῦσι τοὺς ἄθλους, κάτωθεν Ἐκκλησίᾳ τὴν οὐράνιον δόξαν· ἣν εὗρες πόνοις καὶ ἄθλοις τοῖς σοῖς Φανούριε ἔνδοξε.


Apolitiquio tono 4º

Una canción de alabanza celestial se canta radiantemente sobre la tierra; la compañía de los ángeles ahora celebra alegremente una fiesta terrenal, y desde lo alto con himnos alaban tus contiendas, y desde abajo la Iglesia proclama la gloria celestial que has encontrado por tus trabajos y luchas, oh gloriosos Fanourio.
 
 
 

Κοντάκιον Ἦχος γ΄. Ἡ Παρθένος σήμερον.

῾Ιερεῖς διέσωσας, αἰχμαλωσίας ἀθέου, καὶ δεσμὰ συνέθλασας, δυνάμει θείᾳ θεόφρον· ᾔσχυνας, τυράννων θράση γενναιοφρόνως· εὔφρανας, Ἀγγέλων τάξεις Μεγαλομάρτυς· διὰ τοῦτό σε τιμῶμεν, θεῖε ὁπλῖτα, Φανούριε ἔνδοξε.

 

Condaquio tono 3º

Salvaste a los sacerdotes de un cautiverio impío, y rompiste sus lazos por el poder divino, ¡oh, mente divina! Valientemente avergonzaste la audacia de los tiranos, y alegraste las órdenes de los ángeles, gran mártir. Por lo tanto, te honramos, oh guerrero divino, el más glorioso Fanourio.





Fuentes consultadas: saint.gr, synaxarion.gr, diakonima.gr.

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