Versos:
“Rechazaste a la madre tierra, muy bendito Metrófanes, de allí partiste al gran Padre de todos”.
“Rechazaste a la madre tierra, muy bendito Metrófanes, de allí partiste al gran Padre de todos”.
Por lo tanto San Metrófanes, el hermano de Probo y el hijo
de Dometio, fue elevado al trono de Bizancio. Cuando Constantino el Grande
descubrió que el santo Metrófanes era Obispo de Bizancio, observó su virtud, su
trato justo en el juicio y la santidad que tenía. Por eso se dice que no solo
amó la tierra de Bizancio por su buena posición, por la suavidad de su clima
durante las cuatro estaciones del año, por ser un lugar que produce una gran
cantidad de fruta, para recibir y servir como dos manos por tierra y por mar,
por ser el lugar donde se encuentran los dos continentes de Europa y Asia, sino
que Constantino el Grande amó a Bizancio por la virtud y la santidad del santo Metrófanes,
que era el obispo de allí.
Así pues, fue generoso con esta
tierra y, sin aumentar los gastos, construyó la maravillosa y gran ciudad de
Constantinopla, que ha sido victoriosa y ha superado a todas las demás ciudades
de la “ecumene” (tierra habitada conocida hasta el momento), y allí estableció
la capital de su imperio, trasladándola desde la antigua Roma.
Cuando el Santo y Ecuménico Primer Sínodo se reunió en Nicea
en el año 325, el bendito Metrófanes, debido a la vejez y la enfermedad, no
pudo aparecer en persona en el Sínodo, y quedó postrado en cama, porque la
fuerza natural de su cuerpo se estaba desvaneciendo . Por esta razón envió a un
diputado al Sínodo, su Protopresbítero Alejandro (del gr. “Αλέξανδρος”, [Aléxandros]),
un hombre honorable, a quien dejó el trono como sucesor en el año 330. Al
concluir el Sínodo, Constantino el Grande regresó a Constantinopla junto con Padres
“Teoforos” o portadores (del espíritu) de Dios
participantes en el Sínodo.
Entonces Metrófanes comunicó a los Padres que Dios le había
revelado que el sucesor al trono de
Constantinopla debía ser el Protopresbítero Alejandro y después de él
Pablo; siendo asi agradable a Dios, que ellos fuesen dignos del oficio patriarcal.
* Poco despues, el bendito Metrófanes reposó y se fue al Señor. Su Sínaxis y
Fiesta se celebra en la Santísima Gran Iglesia, y en su venerado Templo, que
está cerca del Santo Mártir Akakios (Acacio) en Eptaskalo, donde también se
encuentraN sus honorables y santas reliquias.
NOTAS:
* La sede de Bizancio, cuya fundación fue atribuida a San Andrés
el Apóstol, fue originalmente un obispado común, conocido como el Obispo de
Bizancio. Ganó importancia cuando el emperador Constantino elevó a Bizancio a
una segunda capital junto a Roma y la nombró Constantinopla en 330. Se dice que
en el Primer Sínodo Ecuménico en 325, el obispo de Bizancio fue elevado al
arzobispado, haciendo a Metrófanes el primer Arzobispo de Bizancio. El estatus
eclesiástico de la sede como el segundo de los cinco patriarcados fue
desarrollado por los Sínodos Ecuménicos de Constantinopla en 381 y Calcedonia
en 451.
En
el Primer Sínodo Ecuménico en 325, Metrófanes ya era un hombre de
ciento diecisiete años e incapaz de participar en la obra del Sínodo,
por lo que nombró a Alejandro como su representante. Después del Sínodo,
el emperador invitó a todos los Padres a visitar al arzobispo enfermo y
anciano. Cuando el emperador le preguntó a quién deseaba nombrar como
sucesor del trono patriarcal, Metrófanes nombró a Alejandro.
A continuación le dijo a Alejandro de Alejandría: "Oh hermano, seguirás
siendo mi más digno sucesor". Luego tomó la mano del archidiácono
Atanasio (más tarde Atanasio el Grande y Patriarca de Alejandría) y le
elogió ante todos. Después de esto, se dice que diez días después
Metrófanes durmió en el Señor.
Ἀπολυτίκιον. Ἦχος πλ. α’. Τὸν συνάναρχον Λόγον.
Ἀρετῶν
ταῖς ἀκτῖσι καταλαμπόμενος, Πατριαρχῶν ἀνεδείχθης γέρας καὶ θεία
κρηπίς, ὡς Χριστοῦ μυσταγωγός, Πάτερ Μητροφάνες, ἀπὸ δὲ θρόνου ὑψηλοῦ,
τῇ Ἐκκλησίᾳ δαδουχεῖς, τὸ φέγγος τῆς εὐσεβείας. Καὶ νῦν ἀπαύστως
δυσώπει, ἐλεηθῆναι τὰς ψυχὰς ἡμῶν.
Apolitiquio tono 1º. Al Logos coeterno
Oh, buen pastor, proclamaste el gran misterio de la Trinidad
y manifestaste la dispensación de Cristo a todos. Hiciste huir a los lobos
espirituales que amenazaron tu rebaño racional, y salvaste a los corderos de
Cristo que claman: Gloria a Aquel que te ha fortalecido; Gloria al que te ha
exaltado; Gloria a Aquel que a través de ti ha fortalecido la Fe Ortodoxa.
Κοντάκιον. Ἦχος β’. Τὰ ἄνω ζητῶν.
Τὴν πίστιν Χριστοῦ, τρανῶς σὺ ἐδογμάτισας, καὶ ταύτην τηρῶν, εἰς πλῆθος ὄντως ηὔξησας, τὸ πιστόν σου ποιμνίον· σὺν Ἀγγέλοις ὅθεν Μητροφάνες, συναγάλλῃ νῦν, καὶ Χριστῷ πρεσβεύεις, ὑπὲρ πάντων ἡμῶν.
Condaquio tono 2º
Tú proclamaste la fe de Cristo con tus palabras, y con tu
vida aumentaste el rebaño de Cristo a una multitud. Ahora te regocijas con los
ángeles, y estás orando incesantemente por nosotros, oh Metrófanes.
Fuentes consultadas:saint.gr, synaxarion.gr, apostoliki-diakonia.gr, diakonima.gr