lunes, 25 de marzo de 2024

Anunciación de la Santísima Madre de Dios

Establecida en la casa de José, la Santísima Virgen María llevaba prácticamente el mismo modo de vida que había llevado en el templo.


La mayor parte del tiempo lo pasaba en solitaria oración, en el silencio, en la lectura de las Escrituras y en manualidades. No descuidaba los quehaceres domésticos, siendo una fiel y preciosa ayuda para el anciano José.
Pasado un tiempo no muy largo después de que la Santísima Virgen se hubo establecido en Nazaret, fue visitada por el Arcángel Gabriel, quien antes le había anunciado al sacerdote Zacarías acerca del nacimiento de Juan el Bautista. Encontrándola leyendo las profecías de Isaías acerca del nacimiento del Mesías de una Virgen, el Arcángel La saludó con estas palabras: ¡Alégrate Bienaventurada! ¡ El Señor está Contigo! ¡Bendita eres Tú entre las mujeres!
 
 
 
 




 
 
 
Esta imprevista aparición del Ángel y la alegre salutación agitaron a la joven Virgen. ¿No será esto alguna tentación? Mas el mensajero celestial, tranquilizándola, Le explica que Él le está anunciando la voluntad de Dios: ¡No temas María! Tú has hallado gracia de Dios, y concebirás, y de Ti nacerá un Hijo, a Quien llamarás Jesús. 
Él será grande y Se llamará el Hijo del Todopoderoso y el Señor Dios Le dará el trono de David, Su padre, y reinará en la casa de Jacob por los siglos de los siglos, y Su Reino no tendrá fin.
La Santísima Virgen, que ya en el templo había hecho la promesa de la virginidad, replicó al Ángel: ¿De qué modo será esto? Yo no tengo esposo. — A lo cual él Le contestó: El Espíritu Santo descenderá sobre Ti y la fuerza del Todopoderoso Te cubrirá y por esto El que naciere, Santo será y Se llamará Hijo de Dios.
 
 
 
 







 
 
Revelando con este anuncio el altísimo e inalcanzable misterio de la encarnación del Hijo de Dios, el Arcángel Gabriel para confirmar la veracidad de sus palabras agregó: He aquí Elizabet, Tu pariente, concibió un hijo en su vejez y este es el sexto mes de ella, que había sido llamada estéril. ¡Para Dios todo es posible!
Habiendo oído esto, la Santísima Virgen percibió en su llamado para ser la Madre del Mesías la voluntad de Dios, para Quien no hay oposición. Imbuida por el sentimiento de agradecimiento y obediencia a Dios, con humildad contestó: Soy la sierva del Señor, que sea en Mí según Tu palabra. El Arcángel se volvió invisible.


De este modo se cumplió el grandioso milagro de todos los tiempos: por el descenso del Espíritu Santo sobre la joven Virgen, en Su vientre se encarnó el Hijo de Dios, Quien de este modo Se hizo verdadero hombre, permaneciendo al mismo tiempo como Dios absoluto, consubstancial con el Dios Padre y el Espíritu Santo.
 
 










 
 
EVANGELIO DE LA FIESTA. (Lucas 1:26-38)  
 
Con breve interpretación P. Trempelas.


La Anunciación de la Virgen María. 

26. Al sexto mes del embarazo de Elisabet envió Dios al arcángel Gabriel a una ciudad de Galilea, que se llamaba Nazaret,


27. a una muchacha virgen que estaba comprometida con un hombre que se llamaba Iosíf. Esta muchacha virgen procedía de la generación de David, y su nombre era Mariám.


28. Y entrando el ángel en su habitación, le dijo: Alégrate, tú que eres favorecida por Dios con muchas y excepcionales virtudes. El Señor está contigo, y Él te ha llenado con sus virtudes. Has sido tú bendecida como ninguna otra mujer.


29. Mas ella, cuando vio al ángel, se turbó mucho por las palabras que le dijo y pensaba dentro de ella qué significaba y cuál era el sentido de esta salutación.


30. Entonces el ángel le dijo: no temas, Mariám, sino alégrate, porque Dios te ha juzgado digna de recibir su excepcional favor y gracia. 








 
 
 
 
31. Y mira cuál es aquí la gracia excepcional que no la recibió jamás ningna otra mujer sino que sólo has sido juzgada digna de recibir: concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le darás el nobre "Jesús".


32. Este será grande debido a su santidad y debido a su dignidad. Al hacerse hombre se convertirá en perfecto hombre, será reconocido que es el Hijo de Dios, que es más elevado y superior a todo y todo lo domina. Y le elevará el Señor Dios también como hombre. Le dará el trono de su ascendente David.

33. Y reinará eternamente como inmortal y eterno gran sacerdote y rey sobre los fieles de todas las generaciones, los cuales constituirán la espiritual y verdadera familia de Jacob; y su reino no tendrá fin, como el reino de los reyes terrenales, sino que será interminable y eterna, debido a que sera divina.

34. Dijo entonces Mariám al ángel: ¿Cómo sucederá este misterio sin antecedentes y nunca antes escuchado y cómo quedaré embarazada y daré a luz, si no tengo relación matrimonial con hombre? 












35. Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti. Él te limpiará del pecado ancestral y te santificará. Y el poder del Altísimo arrojará su creadora y amparadora protección sobre ti. Por eso la absolutamente impecable y santa criatura que nacerá de este modo sobrenatural, se reconocerá que es el mismo Hijo de Dios.


36. Y para asegurarte de que realmente tendrá lugar este gan milagro sobre ti, te revelaré también algo más, milagro desdeluego menor, el cual sin embargo no te lo esperabas. He aquí, tu parienta Elisabet, ella también ha concebido hijo en su anciana edad. Y se encuentra en el sexto mes de su embarazo, ella, a quien denominaban todos hasta ahora estéril.


37. Y sin embargo ahora está embarazada, porque ninguna cosa es imposible para Dios, cada cosa milagosa o sorprendente que el enfermo hombre aseguraría que es superior a sus capacidades.


38. Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; dispuesta a servir sus voluntades. Ojalá se haga conmigo como me has dicho. Y en cuanto dijo estas palabras, con las cuales declaró humildemente su sometimiento a la voluntad de Dios y se confió a sí misma en su providencia, el ángel se fue de su presencia.










Canon para la Fiesta de la Anunciación
 
 
 
 
 

 

 

Ἀπολυτίκιον. Ἦχος δ’.


Σήμερον τῆς σωτηρίας ἡμῶν τὸ κεφάλαιον, καὶ τοῦ ἀπ' αἰῶνος μυστηρίου ἡ φανέρωσις· ὁ Υἷός του Θεοῦ, υἱὸς τῆς Παρθένου γίνεται, καὶ Γαβριὴλ τὴν χάριν εὐαγγελίζεται. Διὸ καὶ ἡμεῖς σὺν αὐτῷ, τῇ Θεοτόκῳ βοήσωμεν· Χαῖρε Κεχαριτωμένη, ὁ Κύριος μετά σοῦ.


Apolitiquio tono 4º

Hoy es el principio de nuestra salvación y la manifestación del misterio de los siglos: el Hijo de Dios se hace hijo de una Virgen, y Gabriel anuncia la divina gracia. Por lo tanto, también nosotros clamamos con él a la Madre de Dios: Alégrate, oh llena de gracia, el Señor está contigo.
 
 
 

Κοντάκιον  Ἦχος πλ. δ’. Αὐτόμελον.

 

Τῇ ὑπερμάχῳ στρατηγῷ τὰ νικητήρια

Ὡς λυτρωθεῖσα τῶν δεινῶν εὐχαριστήρια

Ἀναγράφω σοι ἡ Πόλις σου Θεοτόκε.

Ἀλλ’ ὡς ἔχουσα τὸ κράτος ἀπροσμάχητον

Ἐκ παντοίων με κινδύνων ἐλευθέρωσον

Ἵνα κράζω σοι, χαῖρε Νύμφη Ἀνύμφευτε.

Condaquio tono plagal del 4º

Nosotros Tus siervos, ¡oh Madre de Dios! Como librados de las desgracias, te traemos a Ti, Generala, que nos defiendes en las batallas, agradecida canción de triunfo, oh guerrera y defensora. Y Tú que eres invencible, líbranos de las diversas desgracias para que podamos exclamarte: Regocíjate, oh Novia no Desposada.
 
 
 
 

Μεγαλυνάριον.


Νῦν εὐαγγελίζεται Γαβριήλ, τὸ χαῖρε κραυγάζων, μετὰ δέους τῇ Μαριάμ. Ὢ τοῦ ξένου τρόπου, ἐν μήτρᾳ γὰρ ἀχράντῳ, συνείληπται ὁ Πλάστης, σώζων ὃν ἔπλασε.

 

Megalinario

Con la voz del arcángel nosotros clamamos a ti, oh Purísima: Salve, oh llena de gracia, el Señor es contigo





Fuentes consultadas: iglesiaortodoxa.cl, fatheralexander.org, cristoesortodoxo.com, ia800305.us.archive.org

Translate