miércoles, 21 de agosto de 2024

El Apóstol Judas Tadeo, el Hermano del Señor

Versos:
"¿Para quién más debería crear una corona, Tadeo?
Dijeron sus testigos oculares como iniciados del Logos".
En el vigésimo primero Tadeo voló lejos de la vida.

El Santo Apóstol Judas Tadeo fue uno de los Doce Discípulos del Señor. Aunque lleva el mismo nombre que Judas Iscariote, quien traicionó al Señor, en inglés su nombre se ha acortado a "Jude", mientras que Judas es la traducción griega del nombre hebreo Judah. El Nuevo Testamento lo distingue con varios nombres.
"Judas de James" solo se menciona dos veces en el Nuevo Testamento: en Lucas 6:16 y Hechos 1:13. La Epístola de Judas afirma que fue escrita por "Judas, un siervo de Jesucristo y un hermano de Santiago (James)" (Judas 1: 1). Este Santiago era el hermano de Judas y del Señor y el primer obispo de Jerusalén, quien fue martirizado al ser arrojado desde el pináculo del Templo.
El Evangelio de Juan también menciona una vez a un discípulo llamado "Judas, no el Iscariote", quien le pregunta a Jesús: "Señor, ¿cómo es que te manifestarás a nosotros y no al mundo?" (Juan 14:22). A menudo se acepta que es la misma persona que el apóstol Judas.
 
 





 
 
 
En Mateo 10:3 y Marcos 3:18, se omite a Judas, pero hay un Tadeo (o en algunos manuscritos de Mateo 10: 3, "Lebeo que se apellidaba Tadeo") en su lugar. Esto ha llevado a muchos cristianos desde los primeros tiempos a proponer un "Judas Tadeo", conocido por cualquiera de los dos nombres. Esto se hace plausible por el hecho de que "Tadeo" parece ser un apodo. Mientras Lebeo significa "ardiente", porque Judas se unió a Jesús con todo su corazón, Tadeo significa "el que alaba", porque glorificó y alabó a Cristo. Tadeo, uno de los Doce Discípulos, a menudo es indistinguible *1 de Tadeo de Edessa, uno de los Setenta Apóstoles que convirtió a Edessa y entregó la imagen de Cristo "no hecho con las manos" al rey Abgar, y se celebra el 21 de agosto.
Judas era el hijo de José, que estaba comprometido con la Theotokos, cuya madre real era Salomé, hija de Hageo, el hijo de Baraquías, un hermano Zacarías, el padre de Juan el Bautista y Precursor. En Juan 7:5 se nos dice que Judas, siendo uno de los hermanos de Cristo, inicialmente no creía en el mensaje de Cristo.
Juan 14:22 puede indicar que Judas llegó a creer en el mensaje de Cristo antes de Su Santa Pasión. Consciente de sus pecados anteriores de falta de fe y amor fraternal, más tarde escribió: "Judas, un siervo de Jesucristo y un hermano de Santiago (Jacobo)" (Judas 1: 1), sin atreverse a llamarse a sí mismo un hermano del Señor, pero en lugar de confesar que (Jesucristo) era el Señor encarnado sin un hermano terrenal según la carne.
 
 
 
 



 
 
 
 
 
Judas se casó con una mujer llamada Mariam, y el historiador Eusebio nos dice que durante el reinado de Domeciano (81-96 d.C.), dos nietos del apóstol Judas fueron llevados ante el propio emperador, quien basado en las calumnias de los herejes temía que presentaran algún peligro político para él. Cuando el emperador los examinó y vio que simplemente se dedicaban al trabajo de la tierra, los liberó ya que no representaban ningún peligro para él.
El historiador Nicéforo Calixto Xantópulos escribe sobre Judas: "El divino Judas, que tenía el doble título de Tadeo y Lebeo, el hijo de José y el hermano de Jacobo (Santiago) que fue arrojado del pináculo del Templo de Jerusalén, predicó el Evangelio y difundió el cristianismo primero en Judea, Galilea, Samaria, Idumaea, y luego en Arabia, Siria y Mesopotamia. Finalmente, llegó a la ciudad de Edessa, que pertenecía al rey Abgar, donde el evangelio había sido predicado antes que él por otro Tadeo, uno de los setenta apóstoles. Allí, el apóstol Judas comenzó y completó lo que no había sido terminado por ese Tadeo ".
Trabajando de esta manera para la iluminación de los pueblos paganos y convirtiéndolos de sus antiguas supersticiones a la luz del verdadero conocimiento de Cristo, se dirigió a las tierras alrededor del Monte Ararat, donde convirtió a una multitud de personas al cristianismo. Habiendo despertado a los incrédulos paganos, allí lo capturaron y fue sometido a diversas torturas. Luego le colgaron y comenzaron a dispararle flechas. De esta manera entregó su alma en manos de Dios, y recibió de Él la corona inmarcesible del martirio.
 
 
 


El Apóstol Judas Tadeo. 


 
 
 
El Apóstol Tadeo y la curación de Abgar, Príncipe de Edesa.

Fue una misión extraordinaria: Dirigirse hacia Edesa para encontrar al príncipe que estaba lidiando con la lepra... y curarlo en el nombre del Señor Jesucristo.
Para el Apóstol Tadeo, nativo de la ciudad que hoy en día es Edesa de Siria,**2 que había llegado a Jerusalén y sido bautizado Cristiano nada menos que por Juan el Bautista, el predecesor de Jesús, la conversión del Príncipe Sirio Abgar, en el Siglo Primero de Nuestro Señor, subrayaría el maravilloso poder de la Sagrada Providencia de Dios.
Como uno de Los Setenta *1, este gran número de discípulos que ayudarían a los Doce originales a llevar el mensaje del cristianismo al mundo entero, el joven Tadeo era un siervo celoso y enérgico del Santo Evangelio. Cuando Jesús, su Señor y Salvador fue crucificado y luego ascendido al Cielo, el fiel discípulo Tadeo fue enviado a su ciudad natal e informado que debería hacer contacto con el Príncipe.
Sin embargo lo que el incondicional Tadeo no sabía a cabalidad al momento de ser designado para esa tarea en Jerusalén era que, para ese entonces, el Príncipe Abgar ya se había beneficiado de una larga y reverente relación con Jesús. Ciertamente, algunos años antes de la muerte del Santo Redentor, el gobernador de ese país lejano había tenido conocimiento de los milagros que Cristo estaba realizando en la región Galilea de Palestina –y le había enviado un mensaje solicitándole ser curado de la lepra que lo aquejaba.
Respondiendo a su solicitud sincera Jesús le había enviado dos maravillosos regalos al príncipe. El primero fue una imagen de su rostro que había sido impresa milagrosamente en una toalla; y en segundo lugar una carta sin igual, por su bondad y compasión. 
 
 
 






 
 
 
Con esta carta, el corazón compasivo del Señor marcó el escenario de una de las más estimulantes jornadas que el Apóstol Tadeo habría de realizar, al tiempo en que regresaba a su Edesa natal **2 con el fin de ayudar a llevar las promesas de Cristo. Suficientemente entendible, el atribulado Príncipe se mostró regocijado con la llegada del discípulo y rápidamente le dio unas noticias muy alegres: Luego de haber besado la toalla que contenía el rostro impreso del Nazareno, Abgar observó atónito cómo desaparecía la mayor parte de su lepra. Sin embargo aún permanecía un pequeño residuo, el mismo que perturbaba muy grandemente al príncipe. No era médico pero entendía que a menos que la lepra haya sido erradicada completamente la infección podría, una vez más, expandirse y atacarlo con toda su virulencia. 
Terriblemente asustado pero también lleno de esperanza, Abgar rogó al santo discípulo que lo ayudase a remover los últimos vestigios de esa enfermedad que estaba destruyendo su vida.
San Tadeo no dudó en satisfacer su pedido. Su estrategia para vencer a la infección fue realmente inspirada. Luego de rezar y meditar largamente con el gobernante real de Edesa, lo bautizó en el nombre de Cristo. Después de ello rezó para librarlo de la enfermedad que había infestado su cuerpo. Los resultados se hicieron notar de manera inmediata; tan pronto como Abgar salió del agua, la lepra remanente cayó de su piel. 
Glorificó a Dios al tiempo que agradecía al joven Tadeo, cuyos ojos se mostraban brillosos y tenía un corazón satisfecho.  
Tan pronto como la gente de Edesa vio que su agradecido Príncipe había sido curado dieron gracias en voz alta al Hijo de Dios proclamándose Cristianos. Prontos a agradecer al discípulo por lo que había hecho, el agradecido Abgar dispuso que fuese removida del tesoro público una inmensa pila de oro para ser llevada al palacio.  Ahí le ofreció el oro a Tadeo –quien educadamente declinó aceptarlo. El piadoso santo dijo, al tiempo que señalaba que muy temprano en su vida había realizado el voto de pobreza: “Ya que dejé (entregué) el oro que era mío, ¿cómo podría recibir el oro de otros?” 
 
 





 
 
 
 
Luego de haber finalizado su misión en Edesa San Tadeo continuaría predicando el Santo Evangelio en Mesopotamia y en Fenicia (hoy parte del Líbano moderno) para morir el año 44 de Nuestro Señor en la gran ciudad Mediterránea de Beirut. Su vida nos provee un ejemplo maravilloso de la importancia de la obediencia en la vida de los cristianos. Obedeciendo la Voluntad del Señor, San Tadeo llevó la salud a un Príncipe lejano –al tiempo en que ayudaba a convertir la ciudad de Edesa. La gran fe de Tadeo continúa inspirando a los Cristianos hoy en día, ya que muestra que Dios Todopoderoso nunca decepciona a aquellos que continúan creyendo en El.
 
 
 
NOTAS:

*1. Para aclarar esta controversia de si el Apóstol Tadeo pertenecía a los 70 o a los 12 iniciales, se repite lo ya expuesto más arriba, del historiador Nicéforo Calixto Xantopoulos: "El divino Judas, que tenía el doble título de Tadeo y Lebeo, el hijo de José y el hermano de Jacobo (Santiago) que fue arrojado del pináculo del Templo de Jerusalén, predicó el evangelio y difundió el cristianismo primero en Judea, Galilea, Samaria, Idumaea, y luego en Arabia, Siria y Mesopotamia. Finalmente, llegó a la ciudad de Edessa, que pertenecía al rey Abgar, donde el evangelio había sido predicado antes que él por otro Tadeo, uno de los setenta apóstoles. Allí, el apóstol Judas comenzó y completó lo que no había sido terminado por ese Tadeo ".  

**2Edesa era la ciudad natal de San Judas de los Setenta, mientras que el Santo Apóstol Judas, uno de los doce Apóstoles del Señor, nació en la ciudad de Nazaret, Galilea. (“Vida de los Santos Apóstoles”, Panfleto Misionero # SA, Copyright (c) 1999, Publicado por la Iglesia Ortodoxa Rusa de la Santa Protección, 2049 Argyle Ave. Los Angeles, California 90068. Editor: Obispo Alejandro (Mileant).)
 
 
 
 
 


 




Apolitiquio tono 4º  (MODELO: “Ταχύ προκατάλαβε” [Tají prokatálabe], “Se adelantó rápidamente”)
 
Ἀπολυτίκιον  (Κατέβασμα) Ἦχος δ’. Ταχὺ προκατάλαβε.
 
Θεοῦ τοῦ ἐν σώματι, ἐπιφανέντος ἠμίν, αὐτόπτης γενόμενος, καὶ ἱερὸς μαθητής, Θαδδαῖε Ἀπόστολε, ἔλαμψας τοὶς ἐν σκότει, τὴν σωτήριον χάριν ὤφθης τῶν ἐν Ἐδέσσῃ, ἰατὴρ λαμπαδοῦχος, διὸ τοὺς προσιόντας σοί, σκέπε ἑκάστοτε.

 
 
 
Ἀπολυτίκιον Ἦχος γ’.
 
Ἀπόστολε Ἅγιε Ἰούδα, πρέσβευε τῷ ἐλεήμονι Θεῷ, ἵνα πταισμάτων ἄφεσιν, παράσχῃ ταῖς ψυχαῖς ἡμῶν.
 
Apolitiquio tono 3º

Oh Santo Apóstol Tadeo, intercede ante el Dios misericordioso para que conceda a nuestras almas el perdón por nuestras ofensas.
 
 

Κοντάκιον Ἦχος α’. Χορὸς Ἀγγελικὸς.
 
Ἐκ ῥίζης εὐκλεοῦς, θεοδώρητον κλῆμα, ἀνέτειλας ἡμῖν, τοῦ Κυρίου αὐτόπτα, Ἀπόστολε θεάδελφε, τοῦ Χριστοῦ κήρυξ πάνσοφε, τρέφων ἅπαντα, κόσμον καρποῖς σου τῶν λόγων, τὴν ὀρθόδοξον, πίστιν Κυρίου διδάσκων, ὡς μύστης τῆς χάριτος.

Condaquio tono 1º Coro Angelical

Has surgido como una rama divina de una raíz noble, oh Apóstol y Hermano de Dios, sabio heraldo de Cristo y testigo ocular del Señor, has nutrido al mundo con tus palabras, y como iniciado del Señor debes enseñar la fe Ortodoxa.
 
 
 
 
Κοντάκιον Ἦχος γ’. Ἡ Παρθένος σήμερον.
 
Ἑορτὴ χαρμόσυνος, τοῦ Ἀποστόλου ἐπέστη, εὐφροσύνως σήμερον, ἐπιτελέσωμεν ταύτην· νέμει γάρ, τοῖς αὐτὸν πίστει ἀεὶ τιμῶσι, λύτρωσιν ἁμαρτημάτων, καὶ ῥῶσιν θείαν· καὶ γὰρ ἔχει παρρησίαν, ὡς θεῖος μύστης Χριστοῦ τῆς χάριτος.

Condaquio tono 3º

La alegre fiesta del Apóstol nos llega con radiante esplendor, mantengamos en este día el júbilo y la alegría... Para aquellos que lo honran con fe sincera, sean perdonados sus pecados con la salud divina, pues ha tenido gran valentía como divino iniciado por la gracia omnipotente de Cristo.
 
 
 






Fuentes consultadas: apostoliki-diakonia.gr. Sinaxario de San Nicodemo el Athonita, *Texto publicado con autorización y bendición del autor, su Santidad Obispo de Jableh, Siria, Demetri Khoury. *saint.gr. *fatheralexander.org *synaxarion.gr

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