miércoles, 11 de septiembre de 2024

Santa Teodora de Vastas en Arcadia

"Cristo mío, perdónalos. Haz de mi cuerpo una iglesia, de mis cabellos árboles y de mi sangre un río".
Cada año, el 11 de septiembre, celebramos y honramos la memoria de Teodora, la Virgen Mártir de Vastas. Esta santa ahora es conocida no solo en nuestro país sino también fuera de él.
Pero, ¿cuál es el camino que recorrió y llegó a la santidad? Mencionaremos brevemente lo que se sabe sobre su vida y estado para que cada uno de nosotros la "envidie" y seamos como ella.
La santa procedía del Peloponeso, por esta razón algunos la llaman Santa Teodora la "Peloponesa". En cuanto a su origen, las regiones más probables parecen ser Arcadia y Messinia.

 


 



 


Vivió durante el siglo IX, es decir, durante los años del Imperio bizantino. Sus padres eran pobres, pero amaban a Dios y transmitieron su fe en Cristo a sus hijos. Desde muy joven, Teodora, en relación con sus otros hermanos, tuvo un amor e inclinación especial hacia lo divino. Amaba tanto a Dios que deseaba dedicarle toda su vida. Adquirió día a día lo que los Santos Padres llaman "Amor de Cristo".
 

Al crecer, decidió vivir en un monasterio y allí cultivar su amor por Cristo. La paradoja, sin embargo, es que ¡no prefirió un monasterio femenino sino uno masculino! Se presentó en el monasterio de "Panaitsa", un monasterio ubicado en los límites de las regiones de Arcadia - Mesenia, como un hombre con el nombre de "Teodoro". No podemos decir con certeza por qué lo hizo. Probablemente quería desaparecer por completo de sus conocidos.

 

 



 


En el monasterio de Androa donde vivió, pronto se convirtió en un ejemplo de paciencia, obediencia y humildad. Estas virtudes la llevaron gradualmente a un gran progreso espiritual que fue reconocido por el higúmeno y por otros monasterios. Los padres del Monasterio, admirados por su personalidad y las dotes que lo distinguían, le encomendaron las obras exteriores del mismo. De hecho, en esta orden siempre hay monjes o monjas con experiencia en la vida espiritual.

Durante el mismo período de tiempo, tuvo lugar una terrible hambruna en el área más amplia del Peloponeso, por lo que la gente y los moradores del Monasterio estaban en peligro de morir de hambre. 


 

 


Todos los padres volvieron sus ojos a "Teodoro" como el único que podía ayudar en esta difícil situación. De hecho, "Teodoro" visitó muchas casas de cristianos para apoyarlos y, si era posible, ahorrar algo para la hermandad monástica.
¡Pero sucedió algo increíble! Una mujer hizo una acusación grave en su contra. Dijo: "¡El monje aquel me dejó embarazada!". Esta noticia se difundió rápidamente. Ya se había creado una calumnia grave. Los padres de la mujer embarazada subieron enojados al monasterio y ordenaron violentamente a "Teodoro" que los siguiera. Aunque el "monje" negó la acusación, no se negó a seguirlos. Luego lo juzgaron en juicio sumario y fue declarado culpable. Recibió el último de los castigos, "muerte por decapitación". 

 

 

La capilla de Santa Teodora en Vastas, Peloponeso

 

Incluso si pudiera probar su inocencia al revelar su cuerpo, ¡prefirió "levantar" la carga de la calumnia! El lugar del martirio fue el pueblo de Vasta en la región de Arcadia. El verdugo lo condujo allí mientras "Teodoro" lo seguía "como un cordero sin abrir la boca". Al poco tiempo, el alma de "Santa Teodora" voló hacia el cielo, en el lugar preparado de las vírgenes mártires de nuestra Iglesia.
El verdugo y sus cómplices, que decapitaron a la mártir, vieron su cuerpo desnudo y arrepentidos pidieron perdón a Dios.
¡El maravilloso evento se hizo conocido en todas partes! El higúmeno y los otros monjes hicieron duelo y llegaron al lugar del martirio y glorificando a Dios enterraron su cuerpo en su Santo Monasterio o según la opinión de otros en el mismo lugar de su martirio.

 

 



 

Se dice que antes de su decapitación, la santa pidió a Dios que los cabellos de su cabeza se convirtieran en árboles y su sangre en un río. De hecho, en el techo del templo establecido ubicado en Vastas de Arcadia, se levantaron árboles que, paradójicamente, se encuentran en el techo y confiesan que "donde Dios quiere, la naturaleza prevalece".
San Crisóstomo, este gran padre de la Iglesia, nos dice: "Celebración de santos, imitación de santos". Tratemos con la ayuda de nuestro Dios y las intercesionesde la danta asemejarnos a ella y hacernos santos porque este es el fin principal de toda nuestra vida.

Nuestro Señor nos exhorta: "Sed santos, porque yo soy santo" (1 Pedro 1:16)


Leer más sobre Santa Teodora de Vastas en Arcadia (inglés)

Vídeo: Iglesia de Santa Teodora con sus 17 árboles atravesando el techo


Apolytikion en el Cuarto Tono

Se demostró que tu sangre era un don preciosísimo y una ofrenda racional para Cristo, el Dios sobre todo, oh, el más puro. Por lo tanto, Venerable Mártir Teodora, concede a quienes alaban tus luchas divinas, súplicas por la remisión de nuestros pecados y la salvación de nuestras almas.

 




Fuentes consultadas: antexoume.wordpress.com,en.wikipedia.org, johnsanidopoulos.com

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