A una edad temprana tuvo una relación espiritual con el obispo de Orión en Evia, quien vio su profunda fe e inusuales dones espirituales, por lo que lo patrocinó para que estudiara en Atenas. Habiendo completado sus estudios, Timoteo regresó con su padre espiritual en Orión, quien lo tonsuró como monje, luego lo ordenó diácono y presbítero. En 1553 el obispo de Orión reposó y Timoteo fue elegido para reemplazarlo. Luego, en 1555, fue ascendido a Metropolitano de Euripos, que tenía su sede en Chalkida.
Durante su episcopado, en tiempos del sultán Selim II (1566-1574) y del patriarca Jeremías II (1572-1595), se emitió un firman del sultán, lo que obligó a convertir las iglesias cristianas en mezquitas. San Timoteo protestó enérgicamente por esta decisión, ejerciendo incluso una dura crítica. Esto lo llevó a un conflicto con el bajá turco de Euripos, que quería expulsarlo y exterminarlo.
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Icono de procesión del Santo de 1861 |
La expulsión del Santo también se debió al triste hecho de que el abad del Monasterio de San Nicolás de Galataki en Evia había sido totalmente separado de San Timoteo, porque la Iglesia de Panagia Perivleptos cerca del pueblo de Politika, fue reclamada tanto por el pueblo de Politika y el monasterio de Galataki. El santo por su carta al Patriarcado Ecuménico defendió la pretensión de la iglesia y su propiedad inmobiliaria de pertenecer a los habitantes del pueblo de Politika, lo que le separó junto con las aspiraciones de propiedad del abad del Monasterio de Galataki, quien logró atraer el favor del bajá de Euripos y le expresó su oposición hostil al Metropolitano.
La esposa del bajá, que era criptocristiana, informó a San Timoteo que su vida estaba en peligro, lo instó a que abandonara Evia en secreto y le envió una gran suma de dinero. Así que una noche de 1572 salió de Evia y partió con una pequeña escolta formada por su diácono y un sacerdote a la costa opuesta del Ática, donde Kalamos era su patria particular. Allí estuvo alojado durante algún tiempo en el Monasterio de la Transfiguración del Salvador en Kalolivadi, fundado alrededor del siglo VI, que reorganizó y rejuveneció espiritualmente.
El santo llegó al punto en de buscar un lugar adecuado para vivir una vida hesicasta. Con este fin fue conducido a las cuevas y celdas ascéticas del monte Penteli, que en los días del Imperio Romano se conocía como monte Amomon. La relación del santo con los ascetas del Monte Penteli, que poseían todas las virtudes, creó tal entusiasmo en él, que se sintió atraído por el lugar y decidió construir allí un monasterio.
Al principio vivió como asceta en la zona de Kallisia de Penteli, donde se fundó el Monasterio de San Nicolás de Kallissia a mediados del siglo XVI, y luego se instaló en la Skete desierta de la Santísima Trinidad "del Agua", donde hasta hoy existe la iglesia de los siglos XV-XVI, que es una dependencia del Monasterio de Penteli En un esfuerzo por buscar un sitio adecuado para establecer su monasterio, descubrió dentro del bosque un esqueleto de un asceta, en el que había un pequeño icono de "Panayía Glykophilousa" (Santísima - Theotokos- del dulce beso).
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| Icono más antiguo del Santo del siglo XVII en la Iglesia de San Jorge de Vraurona. |
San Timoteo permaneció en el monasterio hasta 1580, marcando el monasterio histórico como un gran faro espiritual del Ática con numerosos monjes que llegaban de ochenta en ochenta, mientras que también se encargó de la adquisición de importantes tierras con propiedades en Koropi, Gerakas y Vraurona.
El anhelo de san Timoteo por hazañas más tranquilas y mayores lo llevó a retirarse a la ermita de San Jorge en Gargittos, pero su fama de santidad se hizo ampliamente conocida y esto interrumpió sus aspiraciones ascéticas y hesicastas. Por este motivo huyó de Gargittos y se dirigió a la ermita de San Jorge en Vraurona, que estaba en ruinas. Allí renovó la Iglesia de San Jorge (que hoy alberga la representación iconográfica más antigua de San Timoteo de principios del siglo XVII) y construyó celdas alrededor de la capilla. Allí, con celo y devoción a la lucha ascética, combinado con la oración constante, fue llevado a los niveles más altos de experiencia espiritual.
Según la tradición, una mujer otomana que era terrateniente, y que vivía en la desierta Torre de Vraurona, recurrió al Santo llorando y le suplicó que salvara a sus hijos, que habían sido secuestrados por piratas y estaban en barcos en el mar. Luego, el jerarca obrador de milagros oró al Señor y a la Santísima Theotokos por la salvación y liberación de los niños. Su ferviente oración provocó de inmediato una tormenta salvaje en el mar, que obligó a los barcos piratas a regresar a la costa para que los piratas se vieran obligados a liberar a los niños. Después del milagro realizado, la madre cayó a los pies del Santo y lloró con profunda gratitud. De hecho, ella y toda su familia fueron bautizados como cristianos, mientras que en agradecimiento donó al santo una parte de su propiedad en la zona de Vraurona, que San Timoteo donó al Monasterio de Penteli.
Sin embargo, había algunos vecinos que temían al santo con sospecha y miedo, al ver que estaba adquiriendo propiedades en la zona.También temían que probablemente tomara sus propias propiedades para aumentar su fortuna. Por lo tanto, obligaron al santo a abandonar la zona, e incluso llegaron a quemar su barco. De manera virtuosa, el santo partió en su barco medio destruido, usando su sotana atada a su bastón como vela, y llegó a la isla de Kea, o Tzia, en las Cícladas.
En Kea se instaló en el abandonado Monasterio de San Juan el Precursor en el llamado Monte Elleniko, que había sido fundado en el siglo XII por el emperador Alejo I Comneno, y trató de restaurarlo. Junto al monasterio erigió una pequeña capilla dedicada a San Penteleimon. Después del reposo del Santo, este monasterio se convirtió en estavropégico en 1626, pero se disolvió en 1834 bajo el reinado de Otto. Esta capilla, dedicada a San Panteleimon, influyó en el cambio del nombre de la región de Elleniko a San Panteleimon, como todavía se llama hoy.
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| Icono de "Panayía Glykophilousa" que el Santo encontró sobre el esqueleto del asceta desconocido. Icono desaparecido desde 1966. |
San Timoteo, sin embargo, buscando más tranquilidad y aislamiento, fue durante los meses de verano a una cueva en la región de Louros, que estaba a poca distancia del Monasterio del Precursor. En esta cueva, que se conoce como la Cueva del Monje, el obispo ascético se dedicó a la oración y al ascetismo incesantes. La Cueva del Monje en Louros es el lugar más importante para los habitantes de Kea para recordarles el paso del santo en la isla.
Permaneció en Kea durante unos diez años hasta que murió en paz el 16 de agosto de 1590, aproximadamente a los ochenta años. Su sagrada reliquia fue enterrada con reverencia en la Capilla de San Panteleimon frente al Santo Altar.
Algún tiempo después de su reposo, San Timoteo apareció se le apareció en el sueño a un monje del Monasterio de Penteli y le dio la orden de ir a Kea y llevar su reliquia sagrada al monasterio, y así sucedió. Así, la reliquia sagrada y fragante del monumento del Monasterio de Penteli, San Timoteo Obispo de Euripos, regresó al monasterio que había fundado en 1578.
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| Monasterio Penteli |
La reliquia se guardó en una caja de perlas hasta el período del asedio de los turcos (25 de abril - 20 de julio de 1821), ya que en los días del abad Neófito Degleris (1821-1844) del Monasterio de Penteli, se decidió por razones de seguridad trasladar los tesoros del monasterio, entre ellos la sagrada reliquia de San Timoteo, al "Metochion" o Dependencia de los Santos Dynameos del siglo XVI (Natividad de Theotokos), donde había escondites subterráneos. Así, todos los valioso tesoros fueron trasladados allí junto con la biblioteca del monasterio, que luego fue trasladada a la Acrópolis. Pero cuando el Pachá Omer Vryonis invadió Atenas el 20 de julio de 1821, los soldados turcos que asediaban la Acrópolis descubrieron el escondite en la Dependencia de los Santos Dynameos por una anciana que reveló los tesoros escondidos, ya que ella no resistió la tortura de la Turcos.
Después de la revelación, los tesoros preciosos fueron saqueados, mientras que las reliquias sagradas y los manuscritos fueron entregados a las llamas. Sin embargo, por economía divina, la sagrada cabeza de San Timoteo y el icono de Panagia Glykophilousa sobrevivieron, pero el icono fue robado en abril de 1966 y desde entonces se desconoce su destino. El rescate de la sagrada cabeza de San Timoteo y el icono de la Theotokos se debe a que unos días antes del 20 de julio de 1821, estos dos tesoros sagrados fueron llevados a la Acrópolis para realizar un servicio de santificación de las aguas y procesión para tratar con una epidemia.
De hecho, a finales de julio de 1821 y una vez finalizado el asedio, el abad Neófito Degleris acudió a Egina por motivos de seguridad, pero con él se llevó la cabeza sagrada del santo. De esta manera, se conservó la santa y maravillosa cabeza de San Timoteo, que desde entonces se ha conservado en el Santo Monasterio de la Dormición de la Theotokos en Penteli y específicamente en la capilla homónima, que se encuentra dentro del complejo de edificios.
Fuentes consultadas: saint.gr, johnsanidopoulos.com
