En medio de la desolación que se extendió por todo el país, en la sangrienta guerra civil entre escoceses y pictos, en la que estos últimos fueron completamente sometidos, el obispo Glastian fue el consolador, padre espiritual y protector más caritativo de muchos miles de ambas naciones. Murió en 830, en Kinglace en Fifeshire, Escocia y fue particularmente honrado en ese país y en Kyntire. Según la antigua costumbre de ese país, su nombre se escribe con frecuencia Mac-Glastian, la palabra Mac significa hijo.
Fuentes consultadas: saint.gr, johnsanidopoulos.com, en.wikipedia.org
