"A la multitud de los santos capadocios canto, como verdaderos portadores de la antorcha de Cristo".
El primer domingo del mes de noviembre, conmemoramos a todos los santos de Capadocia, que vivieron o trabajaron allí, autóctonos y extranjeros, hombres y mujeres, conocidos y desconocidos, cuyos nombres sólo el Señor conoce.
Los que conocemos son los siguientes:
Santos Apóstoles: Pedro, Pablo, Andrés, Matías.
Santos Jerarcas: Basilio el Grande, Gregorio de Nisa, Pedro de Sebaste, Gregorio el Teólogo, Anfiloquio de Iconio, Juan II de Constantinopla, Aquiles de Larisa, Oikumeno de Trikke, Agapetos de Sinaus y Firimiliano de Cesarea.
Venerables: Sabas el Santificado, Teodosio el Cenobiarca, Miguel Maleinos, Meletios el Nuevo de Myoupolis, Irene Chrysovalantou, Juan el Ruso, Arsenio de Farasa, Basilio, Lucas, Ignacio, Pedro el Abad de Vatheos Ryakos, Esteban de Chenolakkos, Justo Eudokimos, Hilarión de Dalmatos, Gorgonia la hermana de Gregorio el Teólogo, Macrina la hermana de Basilio el Grande, Nona la madre de Gregorio el Teólogo, Naukratios el hermano de Basilio el Grande, Kanides y José el Nuevo.
Santos Hieromártires: Alejandro de Jerusalén, Alejandro, Martyrios y Sisinios, Blas de Sebaste, Karterios y Longino el Centurión.
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| San Basilio el Grande, con Capadocia de fondo. |
Santos Mártires: Agatodoro, Agapio, Adrián y Euboula, Akakios, Anektos, Antonio, Germanos, Zebinas y Nicéforo, Auxentios, Eugenios, Eustratios, Mardarios y Orestes, Barlaam, Blaise, Gordianos, Gordios, Jorge el Gran Mártir, Elasippos, Mesippos, Pausippos y Neonilla, Eroteis y Kapetoline, Eupsychios, otro Eupsechios, Thespesios, Hieron y Orestes, Julian y Seleukos, Julita, Codrato, Rufinas y Satorninos, Mamas, Merkourios, Porfirio el Mimo, Sergio, Longino el Centurión y los Dos Soldados con él, Yakinthos.
Santos Neomártires: Jorge de Neápolis, Panayiotis de Cesarea y Savvas de Nigdela.
Apolytikion en el cuarto tono
Coro elegido por Dios, compañía sagrada, mártires alabados y multitudes de venerables, sálvanos, renombrados de Capadocia, nosotros que te alabamos, líbranos de enredos, angustias y peligros, nuestros incansables intercesores, al Maestro de todos.
Fuentes consultadas: johnsanidopoulos.com, synaxarion.gr
