Este Santo Nuevo Mártir de Cristo nació en Dimitsana del Peloponeso. Sus padres eran Panayiotis y María, y él recibió el nombre de Eleuterio en el bautismo.Eleuterio era el menor de cinco hijos (los otros eran Jorge, Jristos, Juan y Katerina). Después de asistir a la escuela en Dimitsana, Eleuterio y Juan viajaron a Constantinopla para inscribirse en la Academia Patriarcal. Más tarde, fueron a Iași, Rumanía, donde su padre y sus hermanos tenían negocios.
Algún tiempo después, Eleuterio decidió ir al Monte Atos para convertirse en monje. Debido a una guerra entre Rusia y Turquía, solo pudo viajar hasta Bucarest. Allí se quedó con el cónsul francés, luego con un empleado del consulado ruso.
Eleuterio comenzó a tener una vida de placeres, dejando de lado sus pensamientos de monasticismo. Cuando cesaron las hostilidades, Eleuterio se dirigió a Constantinopla en compañía de algunos musulmanes. En el camino, se apartó de la Ortodoxia y abrazó el Islam. Fue circuncidado y se le dio el nombre de Rachid.
Pronto su conciencia comenzó a atormentarlo por su negación de Cristo. Los otros musulmanes comenzaron a notar un cambio en su actitud, por lo que restringieron sus movimientos y lo vigilaron de cerca.
Un día, Eleuterio fue visto usando una cruz, por lo que los demás lo denunciaron al dueño de la casa, RaisEfendi. El maestro defendió a Eleuterio, lo que puso celosos a los demás. Les dijo que todavía era demasiado temprano para que Eleuterio abandonara todos sus caminos cristianos.
RaisEfendi y su familia viajaron a Adrianópolis (actual Edirne), llegando un sábado. El Metropolita Cirilo, quien más tarde se convertiría en Patriarca de Constantinopla, estaba realizando las vísperas en una de las iglesias de la ciudad. Eleuterio pretendía dar unas cartas al Metropolitano Cirilo, pero éste envió a alguien más para recibirlas. Cuando Eleuterio le dijo a este hombre que quería ropa cristiana, comenzó a sospechar y lo echó. De vuelta en Constantinopla, RaisEfendi le dio a Eleuterio regalos costosos, con la esperanza de influir en él para que siguiera siendo musulmán. Eleuterio, sin embargo, oró para que Dios le permitiera escapar. Huyó a la primera oportunidad, buscando a un sacerdote del Peloponeso que vivía cerca del Patriarcado.
RaisEfendi y su familia viajaron a Adrianópolis (actual Edirne), llegando un sábado. El Metropolita Cirilo, quien más tarde se convertiría en Patriarca de Constantinopla, estaba realizando las vísperas en una de las iglesias de la ciudad. Eleuterio pretendía dar unas cartas al Metropolitano Cirilo, pero éste envió a alguien más para recibirlas. Cuando Eleuterio le dijo a este hombre que quería ropa cristiana, comenzó a sospechar y lo echó. De vuelta en Constantinopla, RaisEfendi le dio a Eleuterio regalos costosos, con la esperanza de influir en él para que siguiera siendo musulmán. Eleuterio, sin embargo, oró para que Dios le permitiera escapar. Huyó a la primera oportunidad, buscando a un sacerdote del Peloponeso que vivía cerca del Patriarcado.
Después de contar su historia, Eleuterio le pidió al sacerdote que lo ayudara a escapar. El sacerdote se negó a ayudarlo por temor a represalias si lo atrapaban. Le dio algunos consejos a Eleuterio y luego lo despidió.
Con algo de ayuda de la embajada rusa, Eleuterio abordó un barco y navegó hasta el monte Athos. En la Gran Laura, Eleuterio fue crismado* y recibido de nuevo en la Iglesia Ortodoxa, y también se convirtió en monje con el nombre de Eutimio.
Eutimio leyó el Nuevo Martirologio de San Nikodemos (14 de julio) y se inspiró en el ejemplo de los Nuevos Mártires. Luego se consumió con el deseo de borrar su apostasía con la sangre del martirio.
San Eutimio fue a Constantinopla con un monje llamado Gregorio, llegando el 19 de marzo de 1814. Unos días después, el Domingo de Ramos (Palmas)**, recibió la Sagrada Comunión. Se quitó la vestimenta monástica, se vistió de musulmán y se dirigió al palacio del Gran Visir, Rusud Pasha. San Eutimio, sosteniendo las palmas en sus manos, confesó que era cristiano ortodoxo y deseaba morir por Cristo. Denunció a Mahoma y a la religión musulmana, luego pisoteó el turbante que llevaba en la cabeza, lo que hizo creer al visir que estaba borracho o loco.
El valiente guerrero de Cristo aseguró al visir que estaba en su sano juicio y que no estaba borracho. Eutimio fue arrojado a una celda oscura y atado con cadenas. Después de una hora más o menos, lo sacaron de nuevo. Con halagos y promesas de riqueza, el visir trató de convencer a Eutimio de que volviera a la fe musulmana. El santo declaró audazmente que el Islam era una religión basada en fábulas y falsedades, y que no volvería a negar a Cristo aunque fuera torturado y asesinado.
El Gran Visir ordenó que el santo fuera golpeado y devuelto a prisión. Después de tres horas, San Eutimio fue llevado ante Rusud Pasha, quien le dijo: "¿Has reconsiderado, o sigues siendo terco?"
Eutimio respondió: "Solo hay una fe verdadera, la de los cristianos ortodoxos. ¿Cómo puedo creer en tu falso profeta Mahoma?"
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| Conmemoración de Santos Neomártires martirizados tras la invasión de Constantinopla (celebrado 70 días después de Pascua). |
Ahora el visir se dio cuenta de que nunca convencería a Eutimio para que regresara al Islam, por lo que ordenó que lo mataran con la espada. Cuando el verdugo intentó atar las manos del santo, dijo: "Vine aquí voluntariamente, así que no hay necesidad de atar mis manos. Permitidme encontrar mi muerte desatado".
A San Eutimio se le permitió caminar hasta el lugar de la ejecución sin ser atado. Iba alegre y sin miedo, con una cruz en la mano derecha y ramas de palmera en la izquierda. Cuando llegaron al sitio, Eutimio miró hacia el este y comenzó a rezar. Agradeció a Dios por hacerlo digno de recibir el martirio por Su nombre. También oró por su familia y por sus amigos, pidiéndole a Dios que otorgase todas sus peticiones que son para salvación.
Entonces San Eutimio besó la cruz que sostenía, luego se arrodilló y dobló el cuello. El verdugo dio un fuerte golpe con la espada, pero esto no lo decapitó. Golpeó de nuevo y no pudo matarlo. Finalmente, tomó un cuchillo y cortó la garganta del mártir.
Entonces San Eutimio besó la cruz que sostenía, luego se arrodilló y dobló el cuello. El verdugo dio un fuerte golpe con la espada, pero esto no lo decapitó. Golpeó de nuevo y no pudo matarlo. Finalmente, tomó un cuchillo y cortó la garganta del mártir.
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| Santo Nuevo Mártir Eutimio del Peloponeso (+ 1814). 22 de Marzo |
San
Eutimio fue asesinado alrededor del mediodía de un 22 de marzo de 1814
en Constantinopla, ganando así un lugar en el Reino celestial donde
glorifica a la Santa, Consubstancial y Creadora de Vida Trinidad, el
Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, ahora y siempre y por los siglos de
los siglos. Amén.
La cabeza de San Eutimio se encuentra en el monasterio ruso de San Panteleimon en el Monte Atos.
Hay una iglesia dedicada a San Eutimio y al Patriarca Gregorio V en Dimitsana. También es celebrado por la Iglesia el 1 de mayo junto con los Santos Ignacio el Nuevo y Acacio.
Hay una iglesia dedicada a San Eutimio y al Patriarca Gregorio V en Dimitsana. También es celebrado por la Iglesia el 1 de mayo junto con los Santos Ignacio el Nuevo y Acacio.
NOTAS:
* La Crismación es aplicada sobre el que, habiendo sido inicialmente bautizado (y crismado) en la Iglesia Católica y Apostólica Ortodoxa (único bautismo válido), reniega de su fe, pero luego se arrepiente y decide volver a la misma. No es válido sin embargo para aquellos que proviniendo, por ejemplo, de la catolicismo romano, deciden convertirse en ortodoxos. En este caso es necesario el Bautismo completo (con Crismación), dado que el catolicismo romano dejó de ser Iglesia desde el Gran Cisma de 1054, siendo por lo tanto inexistentes sus Misterios (Sacramentos).
** Ramos, del griego "βάιον", rama de palmera. En la Iglesia Católica y Apostólica Ortodoxa se utilizan ramas de palmera. Ver Evangelio según San Juan 12, 13 y https://es.wikipedia.org/wiki/Rama_de_palma
Ἀπολυτίκιον Ήχος δ'. Ταχύ προκατάλαβε.
Ιδρώσιν ασκήσεως προστομωθείς Αθλητά, τους πόνους υπήνεγκας του μαρτυρίου στερρώς, Ευθύμιε ένδοξε` έδραμες γαρ ως γίγας, αποθέσθαι την πλάνην, φέρων εν ταις χερσί σου τον Σταυρόν και Βάϊα, , μεθ ων και στεφανηφόρος Χριστώ, χαίρων παρίστασαι.
Apolitiquio tono 4º. Se adelantó rápidamente
Fortalecido por largos años de trabajos ascéticos, soportaste los dolores del martirio con firmeza, oh glorioso atleta Eutimio. Porque te apresuraste a renunciar al error mientras sostenías la Cruz y las ramas de palmera en tus manos. Y con estos te encuentras coronado y regocijándote en la presencia de Cristo.
Κοντάκιον Ήχος γ'. Η Παρθένος σήμερον.
Του Σταυρού το τρόπαιον, και τα βαΐα, κατέχων, εν χερσί Ευθύμιε, κριτή ανόμω παρέστης, ήσχυνας ψευδοπροφήτην εν παρρησία` εύφρανας τους Ορθοδόξους Θεόν τρανώσας, τον Χριστόν, προς ον πρεσβεύεις, υπέρ απάντων των σε υμνούντων πιστώς.
Condaquio tono 3º. Hoy la Virgen.
Sosteniendo el trofeo de la Cruz y las ramas de palmera en tus manos, te presentaste ante el juez sin ley. Renunciaste abiertamente al falso profeta y avergonzaste a sus seguidores, y alegraste a los ortodoxos al predicar a Cristo como Dios Verdadero. Intercede por todos los que te alaban fielmente.
Fuentes consultadas: saint.gr, synaxarion.gr, diakonima.gr
