Este santo y portador de Dios Germán nació alrededor del año 368 en el norte de Dobrudja, de padres extranjeros, siendo del mismo lugar que San Juan Casiano y contemporáneo suyo.La localidad de Casimcea se considera el hogar ancestral de estos dos santos Daciano-Romanos de las bocas del Danubio. Sus padres y antepasados eran cristianos del primer siglo, bautizados en nombre de la Santísima Trinidad, quizás incluso por el Santo Apóstol Andrés y sus discípulos, quienes han sellado la palabra del evangelio de Cristo alrededor del Mar Negro y en la Pequeña Escitia, es decir, hoy Dobrogea. Después de realizar sus estudios en su pueblo natal y cerca del Obispado de Tomisului (Constanza), junto con el feliz Juan Casiano, de quien era amigo y vivieron juntos hasta su muerte, fue a aprender la enseñanza de los Santos Padres en Constantinopla. Luego, juntos, entraron en la vida monástica, en uno de los monasterios en el sur de Dobrudja, que dependía de la famosa Diócesis de Tomisului, donde brillaron grandes jerarcas y portadores de Dios como los santos Teótimo (20 abril) y Bretanio (25 de Enero).
Deseando una vida espiritual en Cristo más elevada, fue con el feliz Casiano a los Padres en Egipto, en el Valle del Nilo. Después de visitarles allí y de recibir muchas palabras útiles, se tomaron un tiempo para conocer a los grandes antepasados egipcios, aprendiendo de ellos la oración incesante. Luego fueron a Tierra Santa a adorar la Santísima Tumba Nuestro Señor Jesucristo. Después pasaron un tiempo en los monasterios de Constantinopla, cerca de San Juan Crisostomo, que ordenó a ambos: a San Juan Diácono y a Germán sacerdote.
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Esto fue alrededor del año 400. En el año 403, cuando algunos jerarcas y gobernantes del este, impulsados por la emperatriz Eudoxia, se alzaron contra San Juan Crisostomo para pedirle que renunciara, entonces el Germán estaba entre los que defendieron al gran jerarca. Este gran hombre fue tan honrado por su amigo, San Juan Casiano, que lo llamó, en su libro "Conversaciones con los Padres del Desierto", Santo Padre Germán.
Contribuyó enormemente a fortalecer la vida monástica en Dobrogea, Italia y la Galia. Después de una lucha espiritual larga y rigurosa, que alcanzó la medida de la santidad, nuestro piadoso Padre Germán regresó a Roma, alrededor de los años 405-415, entregando su alma en paz en las manos de Cristo, de la gracia del Espíritu Santo. El Santo Sínodo de la Iglesia Ortodoxa Rumana estableció el día de la fiesta el 29 de febrero, y cuando no es año bisiestos, el 28 de febrero.
San Juan Casiano y San Germán
San Juan menciona en su libro “Collationes” que él y Germán eran hermanos «no por nacimiento, sino por el espíritu» (Coll. 16,1). Entre los años 378-380, los dos, junto con una hermana de Casiano, hicieron una peregrinación a Belén. Esta última se mantuvo durante el resto de su vida en un monasterio de monjas, pero los dos amigos permanecieron solos durante un tiempo en una celda cerca de la Iglesia del Sepulcro Santo. Durante este tiempo oyeron hablar de los ascetas en Egipto, por lo que decidieron visitar las comunidades monásticas allí existentes. Después de tres años en Palestina, viajaron hasta el desierto de Sketis y Nitria situados al oeste del delta del Nilo (probablemente desde el 384 al 394) y visitaron a numerosos monjes, con los que tenían «entrevistas», más tarde descritas en Collationes.
Contribuyó enormemente a fortalecer la vida monástica en Dobrogea, Italia y la Galia. Después de una lucha espiritual larga y rigurosa, que alcanzó la medida de la santidad, nuestro piadoso Padre Germán regresó a Roma, alrededor de los años 405-415, entregando su alma en paz en las manos de Cristo, de la gracia del Espíritu Santo. El Santo Sínodo de la Iglesia Ortodoxa Rumana estableció el día de la fiesta el 29 de febrero, y cuando no es año bisiestos, el 28 de febrero.
San Juan Casiano y San Germán
San Juan menciona en su libro “Collationes” que él y Germán eran hermanos «no por nacimiento, sino por el espíritu» (Coll. 16,1). Entre los años 378-380, los dos, junto con una hermana de Casiano, hicieron una peregrinación a Belén. Esta última se mantuvo durante el resto de su vida en un monasterio de monjas, pero los dos amigos permanecieron solos durante un tiempo en una celda cerca de la Iglesia del Sepulcro Santo. Durante este tiempo oyeron hablar de los ascetas en Egipto, por lo que decidieron visitar las comunidades monásticas allí existentes. Después de tres años en Palestina, viajaron hasta el desierto de Sketis y Nitria situados al oeste del delta del Nilo (probablemente desde el 384 al 394) y visitaron a numerosos monjes, con los que tenían «entrevistas», más tarde descritas en Collationes.
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En este tiempo, el desierto de Escete se dividió entre los monjes «antropomorfista», los adeptos de la interpretación literal de la Escritura y los «origenistas», que preferían la alegoría y aceptaban algunas otras teorías de un Padre de la Iglesia recientemente fallecido, tal como la teoría de apokastasis, o incluso la preexistencia de las almas. La disputa entre las dos partes consistía en el hecho de si la contemplación de Dios podía ser vista como un acto material, o sea, con otras palabras, si los ascetas podían ver a Dios, ¿Dios era material «a imagen y semejanza del hombre»?, o incluso, ¿el acto de la contemplación se debía al hombre o por la gracia divina?
Las ideas ascéticas y teológicas promovidas por San Juan Casiano en sus trabajos sugieren que estos dos monjes escitas conocían a algunos monjes «origenistas», probablemente a Evagrio del Ponto entre ellos, con quienes compartían la idea de los siete pecados capitales (de hecho ocho, según Casiano) y la triple vida ascética consistente en la purificación (purgatio o catarsis), iluminación (illuminatio o theoria) y la deificación (unitio o theosis), respectivamente. La lucha entre estas dos visiones ascéticas terminó unos quince años después de la llegada de Juan y de Germán. En el año 399 los «antropomorfistas» ayudados por el patriarca Teófilo de Alejandría, comenzaron una guerra contra los «origenistas» que huyeron a otros lugares. Junto a los más conocidos «origenistas», los llamados «Hermanos Largos», Juan y Germán salieron de Egipto y marcharon a Constantinopla, donde apelaron al arzobispo San Juan Crisóstomo para conseguir su protección. Mientras tanto, Casiano fue ordenado diácono y Germán de sacerdote y se convirtieron en miembros del clero de la capital. Hay una hipótesis que afirma que Casiano tomó el nombre de Juan sólo en este momento y que lo hizo en honor de su protector. De todas formas los ataques de Teófilo fueron más allá contra los «origenistas» y San Juan Crisóstomo fue condenado y depuesto después, en el consejo de la Encina en el año 404. Una de las acusaciones fue el hecho de que también aceptaba las enseñanzas origenistas. El latinoparlante Casiano dejó al cabo de un año Constantinopla para ir, junto con Germán, a Roma donde trataron de encontrar apoyo para Juan Crisóstomo, suplicando su causa Icono ortodoxo rumano de San Germán.
A partir de este momento, ya no hay ninguna otra mención sobre Germán, por lo que es probable que muriese en este período de tiempo. Otra posibilidad es que Germán se fuera junto con Casiano al monasterio de Marsella, o incluso que regresara a casa en Escitia Sobre San Germán no hay más datos después de que los dos amigos llegaron a Roma en el 403. La Iglesia Ortodoxa de Rumanía, hace poco tiempo, en el año 1992, canonizó también a su amigo San Germán, conmemorándose los dos santos conjuntamente en el mismo día del año
Las ideas ascéticas y teológicas promovidas por San Juan Casiano en sus trabajos sugieren que estos dos monjes escitas conocían a algunos monjes «origenistas», probablemente a Evagrio del Ponto entre ellos, con quienes compartían la idea de los siete pecados capitales (de hecho ocho, según Casiano) y la triple vida ascética consistente en la purificación (purgatio o catarsis), iluminación (illuminatio o theoria) y la deificación (unitio o theosis), respectivamente. La lucha entre estas dos visiones ascéticas terminó unos quince años después de la llegada de Juan y de Germán. En el año 399 los «antropomorfistas» ayudados por el patriarca Teófilo de Alejandría, comenzaron una guerra contra los «origenistas» que huyeron a otros lugares. Junto a los más conocidos «origenistas», los llamados «Hermanos Largos», Juan y Germán salieron de Egipto y marcharon a Constantinopla, donde apelaron al arzobispo San Juan Crisóstomo para conseguir su protección. Mientras tanto, Casiano fue ordenado diácono y Germán de sacerdote y se convirtieron en miembros del clero de la capital. Hay una hipótesis que afirma que Casiano tomó el nombre de Juan sólo en este momento y que lo hizo en honor de su protector. De todas formas los ataques de Teófilo fueron más allá contra los «origenistas» y San Juan Crisóstomo fue condenado y depuesto después, en el consejo de la Encina en el año 404. Una de las acusaciones fue el hecho de que también aceptaba las enseñanzas origenistas. El latinoparlante Casiano dejó al cabo de un año Constantinopla para ir, junto con Germán, a Roma donde trataron de encontrar apoyo para Juan Crisóstomo, suplicando su causa Icono ortodoxo rumano de San Germán.
A partir de este momento, ya no hay ninguna otra mención sobre Germán, por lo que es probable que muriese en este período de tiempo. Otra posibilidad es que Germán se fuera junto con Casiano al monasterio de Marsella, o incluso que regresara a casa en Escitia Sobre San Germán no hay más datos después de que los dos amigos llegaron a Roma en el 403. La Iglesia Ortodoxa de Rumanía, hace poco tiempo, en el año 1992, canonizó también a su amigo San Germán, conmemorándose los dos santos conjuntamente en el mismo día del año
Troparul Sfântului Cuvios Gherman din Dobrogea, glasul al 8-lea
Cu ostenelile tale, cu privegheri neîncetate, cu rugăciune şi post te-ai nevoit Cuvioase Părinte Gherman, împreună cu Sfântul Ioan Casian, din pământul Dobrogei odrăslind; şi curgerile harului preoţesc, cu rugăciunile Sfântului Ioan cel cu Gură de Aur, te-ai învrednicit a le primi. Bogăţie de daruri duhovniceşti din Ţara Sfântă, prin osârdie ai agonisit şi prin aceasta pe mulţi ai învrednicit pe Hristos a urma. Pentru aceasta părinte al Dobrogei roagă pe Hristos Dumnezeu, să mântuiască sufletele noastre.
Tropario tono 8
¡Te ocupaste de tus trabajos, con vigilias incansables, con la oración y con el ayuno, Santísimo Padre Germán, junto con San Juan Casiano, que viene de la tierra de Dobrogea, y recibiste los flujos de la gracia sacerdotal a través de la oración de Juan Crisóstomo. Te has ganado por tu celo las riquezas de los dones espirituales de Tierra Santa y por lo tanto, digno para muchas personas por seguir a Cristo. Por lo tanto, Padre de Dobrogea, ruega a Cristo nuestro Dios, para que salve nuestras almas!
(Tropario de preguntasantoral.es, traducido por Mitrut Popoiu).
Fuentes consultadas: saint.gr, doxologia.ro, preguntasantoral.es, orthodoxwiki.org, es. wikipedia.org, youtube.com
