viernes, 30 de agosto de 2024

San Alejandro, San Juan IV el Ayunador y Pablo el Nuevo, Patriarcas de Constantinopla

Versos:
A Alejandro: "Huiste del reparto de la carne Alejandro, ocupas tu porción asignada del Señor".
A Juan: "Los rostros de los de la Iglesia son de semblante triste, estando privado de Juan.
Para Pablo: "Pablo abandonó el camino de la vida, encontró descanso del trabajo de la vida".
El día treinta, los tres están ahora ante la Trinidad.

Aunque vivieron en diferentes tiempos, cada uno de ellos entró en conflicto con las actividades de los herejes que trataban de distorsionar las enseñanzas de la Iglesia.

San Alejandro (del gr. " Αλέξανδρος", [Aléxandros]),

nació en Calabria de Italia entre el 237 y el 244. A una edad temprana se dedicó a Dios y finalmente fue ordenado sacerdote. Asistió al Primer Sínodo Ecuménico en Nicea en 325 cuando todavía era sacerdote como representante del ya anciano Metrófano, que era el Obispo de Bizancio. Luego, un ángel del Señor le reveló a Metrófano que debía elegir a Alejandro como su sucesor, y diez días después reposó. 
 
 



San Alejandro, Segundo Patriarca de Constantinopla




De hecho, fue sucedido por Alejandro  en 326 como obispo de Bizancio y estuvo presente en la ceremonia de dedicación de Constantinopla el 11 de mayo de 330, que también lo convirtió en el primer arzobispo de Constantinopla. Durante su episcopado, Alejandro entabló debates con filósofos paganos y se opuso a las herejías, especialmente al arrianismo. 
Fue muy elogiado por Gregorio el Teólogo y Epifanio de Salamina; Teodoreto lo llamó obispo "apostólico". Finalmente reposó en 337, el mismo año que el emperador Constantino el Grande.
 
 
 
 
 

 


Ἀπολυτίκιον  (Κατέβασμα) Ἦχος γ´. Τὴν ὡραιότητα.
 
Μύσται οὐράνιοι ἀποδεικνύμενοι, θεῖοι ἐκφάντορες τῷ κόσμῳ ὤφθητε, τὴν Ἐκκλησίαν τοῦ Χριστοῦ, ποιμάναντες θεαρέστως, ἱερὲ Ἀλέξανδρε, τῆς Τριάδος ὁ πρόμαχος, Ἰωάννη ἔνδοξε, ὁ τῆς χάριτος τρόφιμος, καὶ Παῦλε Ἱερέων ἀκρότης, ὅθεν ὑμᾶς ἀνευφημοῦμεν
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San Alejandro, Patriarca de Constantinopla







San Juan IV el Ayunador, (del gr. "Ιωάννης ο Νηστευτής", [Ioánis o Nisteftís]).


Patriarca de Constantinopla (582-595), es conocido en la Iglesia Ortodoxa como el compilador de un “Nomokanon” penitencial (es decir, la regla de las penitencias), que nos ha llegado en varias versiones distintas, pero su fundamento es uno y único. Estas son instrucciones para los sacerdotes sobre cómo escuchar la confesión de pecados secretos, ya sea que estos pecados hayan sido cometidos, o simplemente sean pecados de intención.
Las reglas de la Antigua Iglesia abordan la manera y la duración de las penitencias públicas que se establecieron para los pecadores obvios y manifiestos. Pero era necesario adaptar estas reglas para la confesión secreta de cosas que no eran evidentes. San Juan el Ayunador emitió su “Nomokanon” penitencial (o "Canonaria"), de modo que la confesión de los pecados secretos, desconocidos para el mundo, estaba basado en la buena disposición del pecador y de su conciencia para reconciliarse con Dios, y así el santo redujo las penitencias de los antiguos Padres a la mitad o más.
 




San Juan IV el Ayunador, Patriarca de Constantinopla



 
 
Por otro lado, establece más exactamente el carácter de las penitencias: ayuno severo, ejecución diaria de un número determinado de postraciones en el suelo, entrega de limosnas, etc. La duración de la penitencia está determinada por el sacerdote. El objetivo principal del “Nomokanon” compilado por el santo Patriarca consiste en asignar penitencias, no simplemente de acuerdo con la gravedad de los pecados, sino de acuerdo con el grado de arrepentimiento y el estado espiritual de la persona que confiesa.
Entre los griegos, y más tarde en la Iglesia rusa, las reglas de San Juan el Aynador son honradas a un nivel "con otras reglas santas", y los “Nomokanon” de su libro se consideran "aplicables para toda la Iglesia Ortodoxa". San Nicodemo del Monte Athos lo incluyó en el Manual para la Confesión (“Exomologitarion”), publicado por primera vez en 1794, y en el “Timón” ( “το πηδάλιον”, [to Pidalion]) publicado en 1800.
 
 







 
La primera traducción eslava fue hecha posiblemente por San Metodio, Isapóstol o Igual de los Apóstoles, al mismo tiempo que produjo el “Nomokanon” en 50 títulos del santo patriarca de Antioquía Juan Scholastikos, cuyo sucesor en el trono de Constantinopla fue San Juan el Ayunador. Esta antigua traducción se conservó en Rus en el "Timón Ustiug"(“Ustiug Rudder” ) del siglo XIII, que se publicó en 1902.
Desde el siglo XVI en la Iglesia Rusa, el “Nomokanon” de San Juan el Ayunador circuló en otra redacción compilada por monjes y sacerdotes del Monte Athos. En esta forma, se publicó repetidamente en la Laura de la Cuevas de Kiev (en 1620, 1624 y 1629).
En Moscú, el Nomokanon Penitencial fue publicado en forma de suplemento del Trebnik (Libro de las necesidades): bajo el patriarca Joasaph en 1639, bajo el patriarca Joseph en 1651, y bajo el patriarca Nikon en 1658. 
 
 








La última edición desde ese momento es que impreso en el Gran Libro de las Necesidades. Una edición académica del Nomocanon con textos paralelos griegos y eslavos y con comentarios históricos y canónicos detallados fue publicada por A. S. Pavlov (Moscú, 1897).
San Juan también se conmemora el 2 de septiembre. Más información sobre su vida.
 
 
 
 
 

 
 
Απολυτίκιο. Ήχος δ'. Ταχύ προκατάλαβε. 
 
Χρισθείς θείω Πνεύματι, της Εκκλησίας ποιμήν, Θεώ Ίεράτευσας, άγγελικώς επί γης, Ιωάννη Πατήρ ημών, συ γαρ δια νηστείας, σεαυτόν έκκαθάρας, κάθαρσιν των πταισμάτων, τώ σω λόγω παρέχεις, τοίς πόθω Ίεράρχα θερμώς προστρέχουσι.
 
Apolytikion tono 4. Ven rápido. 
 
Ungido con el Espíritu divino, tú serviste en la tierra como pastor de la Iglesia y sacerdote de Dios angélicamente, oh Juan, nuestro padre; porque tú, habiéndote purificado con el ayuno, concédenos con tu palabra la purificación de los errores a nosotros, que recurrimos afectuosamente a ti en anhelo, oh jerarca. 





San Pablo el Nuevo, (del gr. "Παύλος ο Νέος", [Pablos o Neos]),

de nacimiento chipriota, se convirtió en patriarca de Constantinopla (780-784) durante el reinado del emperador iconoclasta Leo IV el Jázaro (775-780), y era un hombre virtuoso y piadoso, pero tímido. Al ver el martirio que soportaron los ortodoxos por los iconos sagrados, el santo ocultó su ortodoxia y se asoció con los iconoclastas.
 



San Pablo el Nuevo, Patriarca de Constantinopla




Después de la muerte del emperador Leo, quiso restaurar la veneración del icono, pero no fue capaz de lograrlo, ya que los iconoclastas aún eran bastante poderosos. El santo se dio cuenta de que no estaba en su poder guiar al rebaño, por lo que abandonó el trono patriarcal y se dirigió en secreto al monasterio de San Floro, donde recibió el esquema monacal.
 
 







Se arrepintió de su silencio y asociación con los iconoclastas y habló de la necesidad de convocar el Séptimo Concilio Ecuménico para condenar la herejía Iconoclasta. Siguiendo su consejo, San Tarasio (25 de febrero) fue elegido para el trono patriarcal. En ese momento, era un prominente consejero imperial. El santo durmió en el Señor en el año 804.
 


Ἀπολυτίκιον  (Κατέβασμα) Ἦχος γ´. Τὴν ὡραιότητα.
 
Μύσται οὐράνιοι ἀποδεικνύμενοι, θεῖοι ἐκφάντορες τῷ κόσμῳ ὤφθητε, τὴν Ἐκκλησίαν τοῦ Χριστοῦ, ποιμάναντες θεαρέστως, ἱερὲ Ἀλέξανδρε, τῆς Τριάδος ὁ πρόμαχος, Ἰωάννη ἔνδοξε, ὁ τῆς χάριτος τρόφιμος, καὶ Παῦλε Ἱερέων ἀκρότης, ὅθεν ὑμᾶς ἀνευφημοῦμεν
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Fuentes consultadas: saint.gr, oca.org, diakonima.gr, synaxarion.gr

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