lunes, 2 de octubre de 2023

San Cipriano y Santa Justina (s.III)

Versos: 
"Satanás siente dolor al ver a su viejo amigo, acoge con cariño la espada y muere con Justina". 
En el segundo Cipriano junto con Justina fue decapitado.

San Cipriano era un noble rico, además de filósofo, de Cartago de Libia*. Vivió en los años del emperador romano Dequio (249-251 d.C.) y practicaba el arte de la magia en Antioquía de Siria.
Una vez un idólatra llamado Aglaidas se enamoró de una doncella cristiana llamada Justa. La chica no correspondía a su amor y éste acudió al famoso mago Cipriano.

Éste leyó sus libros de magia, y envió muchos y varios demonios para engañar a la doncella y atraerla hacia el apasionado amor de Aglaias. Sin embargo, no pudo cumplir su propósito. Todos los conjuros y trucos de magia resultaron inútiles frente a la negación constante de Justa. Siendo sensato, se dio cuenta de esto con el poder invencible de Cristo, por el cual la doncella avergonzaba a los demonios, y sin resultado regresaron a su remitente.





"ΟΙ ΠΕΙΡΑΣΜΟΙ ΤΗΣ ΑΓΊΑΣ ΙΟΥΣΤΊΝΙΣ"
[I PIRASMÍ TIS AYÍAS IUSTÍNIS]
LAS TENTACIONES DE SANTA JUSTINA




Admitiendo el fracaso de su arte, quemó sus libros de magia ante el obispo Ancimos e inmediatamente se apartó de su engaño y creyó en Cristo, pidiendo ser bautizado. Luego habiendo pasado por todos los rangos sacerdotales (Lector, Subdiácono, Diácono, Presbítero) fue ordenado finalmente Obispo de Cartago. Junto a él recibió a Justa, la cual fue recibida entre las hermanas diaconisas, pasando a llamarse Justina. Después se convertiría en la Abadesa o Madre Superiora.




"Η ΜΕΤΆΝΟΙΑ ΤΟΥ ΜΆΓΟΥ ΚΥΠΡΙΑΝΟΥ "
[I METANIA TU MAGU KIPRIANU]
LA METANIA (CAMBIO, ARREPENTIMIENTO) DEL MAGO CIPRIANO




Habiendo aumentado su rebaño por sus palabras, y con su vida virtuosa y amante de Dios, siendo llenado desde el amanecer hasta el atardecer con el conocimiento de Dios debido a su entusiasmo apostólico, , fue calumniado y llevado ante el emperador Decio. Resistiendo ante cada adulación y amenaza, finalmente fue exiliado a Antioquía, donde fue encarcelado. Sin embargo, no dejó de cuidar a su rebaño y de apoyarlo continuamente a través de sus cartas, venciendo de este modo toda ilusión de idolatría. Tras haber sido liberado, fue nuevamente arrestado por el conde de Oriente llamado Eutolmios, y encarcelado junto a la santa Justina. Más tarde fueron llevados a juicio en Damasco.




San Cipriano. www.zografiki.com©




Habiendo confesado audazmente a Cristo, Cipriano fue colgado y su cuerpo fue rasgado, y Justina fue golpeada en la cara sin piedad. Luego les pusieron en un horno encendido. Pero con el poder de Cristo, fueron preservados ilesos del tormento. 
Esta cosa maravillosa fue vista por el colega del conde, cuyo nombre era Atanasio, y él sin sentido se derrumbó. Y queriendo mostrar que sus dioses eran más altos y mejores que Cristo, llamó a los falsos dioses Zeus y Asclepios, y corriendo saltó al horno encendido. Inmediatamente el impío fue quemado.
Teniendo en cuenta lo que oficialmente debía hacer, el conde decidió enviar a los santos a Nicomedia al emperador Claudio (268-270). 





Santa Justina




Cuando éste se enteró de las mentes firmes e inalterables de los santos, ordenó cortarles la cabeza. 
De esta manera, los benditos recibieron la corona inmarchitable del martirio. Sus honorables cuerpos fueron recogidos en secreto por algunos cristianos, que acababan de llegar de Roma. Regresaron nuevamente allí, llevando consigo las Santas Reliquias y los testimonios escritos de los santos. ** Y depositaron las reliquias en la colina más famosa de la ciudad de Roma, donde tienen lugar muchas curaciones, para quienes acuden a ellos con fe.





Martirio por decapitación de los Santos Cipriano y Justina



NOTAS:

* Muchas fuentes, incluida la Oración 24 de Gregorio el Teólogo y San Simón el Metafrastes, confunden a San Cipriano de Cartago con San Cipriano de Antioquía. Como resultado, San Cipriano de Cartago no es conmemorado en la Iglesia Ortodoxa, aunque algunos lo conmemoran el 16 de septiembre, que es la fecha de su descanso y conmemoración por parte de la Iglesia Latina.


** Esta puede ser una referencia a la obra titulada Confesión de San Cipriano, que se dice que es la obra del propio San Cipriano, aunque muchos lo dudan. No obstante, fue influyente para personas como Gregorio el Teólogo, quien usó el trabajo a través de su Oración 24 para inspirar a los cristianos a que se apartaran de la idolatría de Juliano el Apóstata.
 
 
 
 
 
 

Ἀπολυτίκιον. Ἦχος γ’. Θείας πίστεως.


Θείας πίστεως, τῇ φωταυγείᾳ, σκότος ἔλιπες, τῆς ἀσεβείας, καὶ φωστὴρ τῆς ἀληθείας γεγένησαι· ποιμαντικῶς γὰρ φαιδρύνας τὸν βίον σου, Κυπριανὲ τῇ ἀθλήσει δεδόξασαι. Πάτερ Ὅσιε, τὸν Κτίστην ἡμῖν ἱλέωσαι, ὁμοὺ σὺν Ἰουστίνη τῇ Θεόφρονι.

 

Apolitiquio tono 3º

Abandonaste la oscuridad impía. y convertirse en una luz de la verdad. Fuiste ilustre como pastor y fuiste glorificado en la contienda. Oh Venerable Padre Cipriano, junto con la piadosa Justina, ruega a Dios el Creador por nosotros.
 
 
 

Κοντάκιον. Ἦχος α’. Χορὸς Ἀγγελικός.

 

Ἐκ τέχνης μαγικῆς, ἐπιστρέψας θεόφρον, πρὸς γνῶσιν θεϊκήν, ἀνεδείχθης τῷ κόσμῳ, ἀκέστωρ σοφώτατος, τὰς ἰάσεις δωρούμενος, τοῖς τιμῶσί σε, Κυπριανὲ σὺν Ἰουστίνῃ· μεθ’ ἧς πρέσβευε, τῷ Φιλανθρώπῳ Δεσπότῃ, σωθῆναι τοὺς δούλους σου.

 


Condaquio tono 1º

Renunciaste a la magia por el conocimiento de Dios, y te convertiste en un sanador sabio para el mundo. Junto con Justina debes curar a los que te honran: con ella reza a Cristo nuestro Dios, el Amante de la humanidad, para que Él pueda salvar nuestras almas.






Fuentes consultadas: saint.gr, synaxarion.gr, diakonima.gr, Sinaxario de los doce meses del año de de San Nicodemo el Athonita.


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