sábado, 22 de junio de 2024

Santos Nuevos Mártires Ambrosio, Neófito y Macario de Vatopedi (+1821)

En 1820 los Hieromonjes Neófito y Ambrosio, el Hierodiácono Parcenio y los monjes Dionisio y Doroteo y más tarde Macario fueron enviados a Creta, por invitación, con reliquias sagradas, para expulsar la terrible enfermedad de la peste, que infectaba a los lugareños. 

Estas reliquias eran una parte del Santo Cinto de la Madre de Dios, que fue un regalo al monasterio del emperador Juan Kantakouzinos, un trozo de Madera Sagrada de la Santa Cruz de Nuestro Señor y el cráneo de San Andrés de Creta.

De la narración del Monje Arsenio Pantokratorinos, que fue copiada el 25 de junio de 1932 y se conserva en el Monasterio de Vatopedi, se nos informa cómo el monasterio envió al Gran Castillo de Creta en Heraklion, en junio de 1820, cinco hermanos con las mencionadas reliquias sagradas. Después de un viaje de quince días, los padres Vatopedi llegaron a Heraklion y después de una recepción oficial allí, realizaron ceremonias de santificación del agua hasta la Pascua de 1821 en tierra firme.

 

 

 


 

 

El 22 de junio de 1821, el clero y los laicos se reunieron en la metrópoli de Heraklion por miedo a los turcos, después de que los griegos se rebelaran en muchos lugares.

Durante la invasión turca del edificio de la Metrópolis, clérigos y laicos fueron asesinados, incluidos los hieromonjes de Vatopedi Neófito y Ambrosio y el monje Macario. El hierodiácono Parcenio y los monjes Dionisio y Doroteo tomaron el Santo Cinto, la Santa Cruz y el cráneo de San Andrés de Creta y se escondieron en las casas de los criptocristianos.

Después de muchas peripecias, arrestaron al monje Dionisio, "intentaron obligarlo a hacerse turco, pero no se convirtió". 

 

 

 

Monasterio de Vatopedi en el Monte Atos

 

Después de muchas torturas, le perforaron la cabeza con un hierro candente y lo ahorcaron el Lunes Limpio o de Pascua de 1822 (13 de febrero). Previamente había confesado sus pecados y recibido los Misterios Divinos e Inmaculados. En una carta del rescatado hierodiácono Parcenio de  Vatopedi del 2 de septiembre de 1824, se confirma que uno de los padres fue ahorcado, aparentemente Dionisio.
Las reliquias, pasando por varias manos, llegaron a Santorini, donde después de muchos esfuerzos el higúmerno o abad Dionisio de Vatopedi logró con la ayuda del metropolita local Zacarías recibirlas y transportarlas de regreso a su monasterio el 2 de mayo de 1831.

 

 

Fuentes consultadas: mystagogyresourcecenter.com

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