Administrativamente, como en toda la región, pertenece al pueblo de Kato Moní. Los nombres de los Santos Heliophotoi, según la forma en que están escritos en sus iconos son los siguientes: Epafroditos, Ammonios, Houlelaios, Ephsthenios y Heliophotos. Heliophotos era su líder, quien también era sacerdote y su padre espiritual, y se presenta en los iconos bendiciendo y sosteniendo el Evangelio. Es de él de quien el resto de los santos tomaron su nombre y son conocidos como Heliophotoi (plural de Heliophotos) entre la gente de Chipre. Ephsthenios y Houlelaios eran pastores, por eso estos dos se presentan con palos de pastor, y los demás los ayudaban a la hora de ordeñar.
Según la tradición histórica, estos santos se encontraban entre los trescientos alamani, refugiados cristianos que llegaron a Chipre después de la Segunda Cruzada, después de que su barco fue destruído en las aguas de Pafos, debido a las olas. Estos santos alamani estaban esparcidos por la isla y continuaron su vida ermitaña en las partes de la isla a las que decidieron ir. Por lo tanto, después de que los Heliophotoi llegaron a Chipre y deambularon por la isla, subieron a la montaña de Koroni, una montaña cerca de la aldea de Kato Moní. Allí, instalaron su ermita en dos cuevas, que encontraron en la cima de la montaña, e hicieron un manantial de agua que existe hasta el día de hoy.
Sus ovejas y sus cabras se multiplicaban a diario y llegaron a contarse por varios centenares, algo que se puede confirmar por la gran extensión de tierra donde guardaban sus corrales. Estos corrales de animales aún sobreviven hasta el día de hoy en el pueblo de Kato Moní y se conocen como los "Corrales sagrados de los santos Heliophotoi". Sobreviven junto con los lugares pétreos de ordeño, que excavaron arriba en la roca, junto con unos canales que transportaban la leche de los lugares de ordeño que reunían toda la leche en un gran estanque de piedra. En toda su extensión, se calcula que su tierra tenía aproximadamente doce acres. Cuando los chipriotas se enteraron de la llegada de los santos, los visitaron a menudo para recibir consejos espirituales, y los santos a cambio no solo les dieron alimento espiritual, sino que también les dieron a los pobres de la región sus productos lácteos.
Según la tradición, cuando el soberano de la isla que se llamaba Sabinos se enteró de los santos, los llamó y les pidió que negaran a Cristo. Los Santos Heliophotoi, con valentía confesaron su fe frente al soberano, quien a cambio ordenó que los azotaran sin piedad, cortándoles la carne, y al final les cortó la cabeza. Posteriormente, los fieles enterraron los cuerpos de los santos en las dos cuevas, dos en una y tres en la otra. Fueron encontrados después de muchos años debido a los muchos milagros que estaban y todavía están ocurriendo allí.
Después de muchos años, los fieles de la región construyeron una pequeña iglesia en su honor. Esta capilla dedicada a los santos con el paso del tiempo se había convertido en un monasterio, que nuevamente fue destruido y ahora solo existe su iglesia, reconstruida en 1750. En el lugar donde ahora se encuentra el pueblo de Kato Moní (en griego significa "Bajo Monasterio"), solía haber otro monasterio y se llamó así, para distinguirlo del otro, "Monasterio Superior " (Pano Moní) de los Santos Heliophotoi. Un icono portátil de los santos Heliophotoi, que fue pintado en 1874, existe en la nueva iglesia de Panayía de Chrysopantanassa en el pueblo de Malounta en Nicosia, junto al cual también hay una calavera de color muy blanco, que según la tradición local, Ambos fueron transportados al pueblo de Malounta hace muchos años por un monje, que abandonó la ermita de los Santos Heliophotoi y se instaló en Malounta.
La memoria de los santos Heliophotoi se celebra el 13 de julio con una gran fiesta que tiene lugar en su iglesia. También se pueden venerar partes de sus reliquias en el Monasterio de Dionisio del Monte Atos y el Monasterio Kykkos en Chipre.
Dos milagros de los santos Heliofotoi
Los santos de Heliofotoi han obrado muchos milagros, entre los que se encuentran los siguientes:
1. En el pueblo de Malounta había un sacerdote que sufría de vez en cuando con sus manos. Estaban llenas de verrugas. Para recibir tratamiento recurrió a muchos médicos de su época, pero el resultado fue desalentador. Al final, el sacerdote se refugió en los santos de Heliophotoi. Hizo un voto y con piedad fue a recibir su gracia. Allí se entristeció mucho al notar que faltaban las calaveras sagradas de los Mártires, junto con gran parte de sus sagradas reliquias. Aunque entristecido, oró y se acostó a descansar. Cuando se durmió, vio venir hacia él a cinco hombres, que se detuvieron frente a él y con voz dulce dijeron: "Anciano, entendemos su dolor. Pero consuélese. Aunque nuestras reliquias fueran robadas, nuestra protección no ha sido perdida. Ve, haz una caja de madera y coloca dentro de ella lo que quede de ellas, y recibirás lo que deseas ". El sacerdote hizo lo que le ordenaron los santos. Cuando regresó y comenzó a colocar en la caja las reliquias restantes, se produjo el milagro. Sus manos fueron sanadas.
2. Una devota mujer de Nicosia padecía una enfermedad incurable. Recurrió a la gracia de los santos, asistió a la liturgia y al final el sacerdote la bendijo con la caja de madera que contenía las sagradas reliquias de los santos. Mientras el sacerdote la realizaba la señala de la Cruz, la mujer quedó completamente sana.
NOTA:
* Heliophotoi o Iliofotoi, transliteración al inglés de "Ηλιόφωτοι", que en griego significa "iluminados por el sol
Video Santos "Heliofotoi" (cueva, sepulcro, ayíasma): Kato Moní Nicosia
Ἀπολυτίκιον Ἦχος β'.
Ἀλαμανίας τοὺς γενναίους μάρτυρας, τοὺς τὰ τῆς γῆς καταλιπόντας ἅπαντα, συνελθόντες εὐφημήσωμεν ἀστέρας ὡς φαιδρούς, Ἠλιόφωτον, Ἐπαφρόδιτον, Ἀμμώνιον καὶ Χουλέλαιον ὁμοὺ σὺν τούτοις καὶ Εὐσθένιον καταστέψωμεν, χορείαν τιμῶν τὲς τὴν πεντάριθμον.
Apolytikion tono 2º
Los valientes Mártires de los Alamani, que renunciaron a todas las cosas en la tierra, unámonos y alabemos como estrellas brillantes, Heliofotos, Epafroditos, Amonios, Houlelaios y Efsthenios, engalanados con guirnaldas, honrando el coro de cinco en número.
