Proveniente de un hogar adinerado en Alejandría, tuvo un buen padre que sufrió mucho y tuvo un final malvado, y una madre malvada que vivió bien, murió en paz y fue enterrada con honores.
Perpleja sobre si debía vivir según el ejemplo de su padre o de su madre, esta doncella tuvo una visión que le reveló las condiciones de su madre y su padre en el otro mundo. Vio a su padre en el Reino de Dios y a su madre en tinieblas y tormentos. Esta visión ayudó a la doncella a decidir que dedicaría toda su vida a Dios y, como su padre, se adheriría a los mandamientos de Dios, sin considerar todas las adversidades y desgracias que tendría que soportar. Ella fue fiel a la voluntad de Dios hasta el final y, con la ayuda de Dios, se hizo digna del Reino de los Cielos donde se reunió con su padre amante de Dios.
NOTA:
* Podría ser que esta "docella desconocida" sea la misma que la Venerable Alejandra que realizó su ascesis en Alejandría en el s.IV (saint.gr), cuya memoria también es celebrada el día de hoy.
Fuentes consultadas: johnsanidopoulos.com, saint.gr
