San Dionisio fue un hieromonje y recluso ermitaño de las Cuevas Lejanas de Kiev, cuyo apodo era Schepa. Es mencionado brevemente en el "Paterikon" (Libro de los Padres) de las Cuevas de Kiev.
En el año 1463 durante los Maitines de Pascua, Dionisio fue con la Cruz e incienso alrededor de los sepulcros con las Santas Reliquias de los complacientes de Dios enterrados en las Cuevas de Kiev. Cuando el monje, lleno de regocijo por la Resurrección, voceó: “Santos Padres y hermanos, ¡hoy es el gran día! ¡Cristo ha resucitado! ", una respuesta resonó de los sepulcros como un trueno: "¡En verdad ha resucitado!".
En el año 1463 durante los Maitines de Pascua, Dionisio fue con la Cruz e incienso alrededor de los sepulcros con las Santas Reliquias de los complacientes de Dios enterrados en las Cuevas de Kiev. Cuando el monje, lleno de regocijo por la Resurrección, voceó: “Santos Padres y hermanos, ¡hoy es el gran día! ¡Cristo ha resucitado! ", una respuesta resonó de los sepulcros como un trueno: "¡En verdad ha resucitado!".
Desde ese mismo día, San Dionisio vivió como un recluso, y después de muchas fatigas y bendiciones, durmió en el Señor. El milagro que involucra a San Dionisio se menciona en la octava Oda del Canon de los Santos de las Cuevas de Kiev.
Fuentes consultadas: Prólogos de Ohrid de San Nikolai Velimirovich, diakonima.gr, synaxarion.gr