viernes, 22 de noviembre de 2024

San Jacobo Tsalikis el Nuevo, el "Me perdonen" (+1991)

El 22 del mes de Noviembre, conmemoramos a nuestro  venerable padre Jacobo llamado Tsalikis, higúmeno del sagrado monasterio de venerable David en Eubea.   
"Venerable Jacobo, recibe nuestros himnos, como los dos céntimos de la viuda. 
Como un ángel de Dios Jacobo fue hacia los cielos."
San Jacobo nació el 5 de noviembre de 1920 en el bendita y regada de sangre tierra generadora de santos, Asia Menor, y más en concreto en Livissi de Makris, una pequeña ciudad de las costas del Mar Jónico, a la altura aproximada de Kastellorizo. 

Era hijo de padres virtuosos y piadosos, llamados Stavros Tsalikis y Theodora.  Los padres del santo dieron a luz a nueve hijos, pero Dios sólo les permitió que se quedasen con tres en esta vida.
La familia del Santo era de las más ricas de la región, pero su auténtica riqueza era el respeto, la devoción y la pureza con que seguían su fe cristiana, la cual tenía unas raíces muy profundas. Entre sus antecesores familiares se encontraban siete generaciones de hieromojes, un sacerdote principal y un santo. Pero los terribles eventos de la destrucción de Asia Menor y del Ponto, las matanzas de miles de griegos por parte de los nuevos turcos y de los "kemalistas" (nacionalistas seguidores de Ataturk) que habían comenzado del año 1915 hasta 1920 d.C.,(no nos referiremos aquí a los nuevos mártires durante la turcocracia en Grecia, otra nueva matanza) también afectaron a la familia de Santiago.
 
 




"ΌΣΙΟΣ ΙΆΚΟΒΟΣ Ο ΜΕ ΣΥΓΧΩΡΕΊΤΕ",
[Ósios Iákobos Ó Me Sigxoríte]
OSIO JOACOBO EL "ME PERDONEN"



 
 
Su abuelo y padrino, George Kremmidas, un verdadero hombre de Dios, su tío, el doctor Hadjidoulis, así como otros familiares, fueron arrestados por los turcos y durante la exterminadora marcha de las tropas turcas en las profundidades de Turquía, fueron asesinados cerca de la actual Nigde turca por los salvajes gendarmes y soldados turcos. Su padre, Stavros Tsalikis, fue hecho prisionero junto con el resto de los hombres de Livissi a principios de 1922. 
Soportaron terribles sufrimientos, viajes interminables y dolorosos trabajos forzados en minas, presas y otros lugares, acabando finalmente en la ciudad de Trebisonda.
San Jacobo nació en 1920 en Livissi de Makris, y poco después se fue a Grecia como refugiado, cerca de Corinto. A la edad de siete años, había memorizado toda la Divina Liturgia, aunque aún no había aprendido las letras. 
 
 
 
 
 
El Yérontas (Anciano)Jacobo arrodillado como siempre ante el icono de Cristo durante la celebración diaria de la D. Liturgia

 
 
 
 
En 1927 fue a la escuela primaria y se distinguió por su entusiasmo y devoción. Todos sabían de su amor por la Iglesia.
Ese mismo año, se le apareció la Santa Paraskeva y le reveló su brillante futuro eclesiástico. En los próximos años recibiría muchas revelaciones de varios santos. Durante esa etapa, él estaba en oración continua e incluso, según informes, había realizado milagros, sanando a varias personas de su aldea.
 Desde 1938 hasta el final de su vida, vivió en un ascetismo extremo, comiendo poco, orando siempre y trabajando duro. Su madre murió en julio de 1942, prediciendo que sería sacerdote. Después de su despido del ejército en 1949 a la edad de 29 años, Jacobo perdió a su padre. Se hizo entonces responsable de su hermana.
 
 
 









A la edad de 32 años, Jacobo se convirtió en monje y el 19 de diciembre de 1952, fue ordenado sacerdote por el Metropolitano Gregorio de Halkida.
 El 25 de junio de 1975 se convirtió en Higúmeno (abad) del Monasterio del Venerable David en Eube, el Monasterio de su metania.
 En 1990, el "Yérontas" (elder, staretz, "anciano") comenzó a perder su fuerza, y hubo una disminución significativa en su salud. En septiembre de 1991, después de una serie de problemas cerebrovasculares, fue hospitalizado en el Hospital Estatal.
En la mañana del 21 de noviembre de 1991, en la fiesta de la Entrada de Theotokos al Templo, celebró la Divina Liturgia. Cuando fue a levantarse a la llegada de los otros monjes, se mareó, su respiración era pesada, su pulso se debilitó, y un pequeño suspiro salió de su boca, y de esta manera entregó su espíritu al Señor. 
 
 




Padre San Jacobo junto a un icono de Osio David de Eubea 
(principios s.XVI), con quien mantenía una estrecha comunicación


 
 
 
A su funeral asistió una gran multitud de personas. Prokopio el Metropolitanos de Cefalonia en un momento dijeron que levantaran su ataúd para que todos pudieran ver al Yérontas. Cuando todos pudieron ver sus santos restos, miles de fieles gritaron al unísono: "¡Santo! ¡Santo!"
 


Algunas enseñanzas de San Jacobo 

El ayuno

El yérontas (monje guía espiritual con experiencia; su traducción literal es anciano) Jacobo de Eubea era un amante del ayuno y conocía por experiencia sus beneficios físicos y espirituales. En tiempos de tentación, no comía absolutamente nada, subsistiendo solo con la Sagrada Comunión. Esto es lo que hizo su modelo y protector San David durante muchos años. Comería una comida sencilla solo los sábados al mediodía, y eso no siempre, y los domingos. Solo Dios sabe cómo soportó un ayuno tan estricto con tanto trabajo manual.
El ayuno es un mandamiento de Dios. Por eso, también debemos ayunar, hijos míos. No he descuidado el ayuno en mis 70 años. 
 
 
 
 
 

 
 
 
 
Mi madre me enseñó a ayunar desde la infancia. No estoy siendo un hipócrita, mis hijos, cuando ayuno, pero estoy haciendo lo que mis padres me enseñaron y lo que tengo hasta hoy, mis hijos. El ayuno nunca me trajo la enfermedad.
Los médicos y los obispos dicen que el ayuno con medida es muy beneficioso para el hombre. Una vez, un médico me dijo: "Padre, no comas durante cinco días, ni bebas ni una gota de agua, porque haremos una prueba para ver qué está pasando con tu cuerpo".
Por lo tanto, ayuné durante cinco días. Me había hecho grandes cosas. ¡Cuánto más nos beneficiamos cuando ayunamos por nuestro alma! Porque dentro de nuestro cuerpo habita un alma eterna. Por lo tanto, cuidemos nuestro alma, que es verdaderamente una cosa inmortal.
 
 
 



Santo "Yérontas" Jacobo Tsaliki





Ayunemos, hijos míos. No escuches a los que dicen que ayunar no es nada, y que esto es algo de los monjes. Esto no es de los monjes, hijos míos, perdóname, Dios dice esto. El primer mandamiento de Dios es el ayuno, y nuestro Cristo ayunó. Podemos decir que estamos ayunando, y que tanto comemos. Ahora, ¿qué ayuno estamos haciendo, hijos míos, cuando comemos, perdóname, tanta comida, aunque sea sin aceite? Es suficiente que el hombre tenga su salud y el deseo de ayunar.
Una vez, alguien se acercó a mí y me dijo: "Mi sacerdote me dijo que el ayuno no existe". "¿Y quién te dijo que no hubo ayuno? Vaya a decirle al sacerdote que abra la Biblia y vea lo que trata sobre el ayuno: "excepto por la oración y el ayuno" (Mateo 17:21, Marcos 9:29), que dice Cristo, y otras cosas. 
 
 
 



Celda monástica del Santo, tal como la dejó





Y los demonios, y las enfermedades, y todas las pasiones son expulsadas con el ayuno. El Santo precursor, ¿qué comió en el desierto? ¿Qué comió el venerable David? Con un antidoron, pasó toda la semana en su celda de ascetismo ". En la foto anterior, la celda monástica de San Jacobo Tsaliki tal como la dejó en el momento de su descanso eterno en 1991, en el Monasterio del Venerable David de Eubea, con estola sacerdotal (epitrachilio) extendida sobre su cama, y algunos otros elementos, como fotografías y un icono.
Un pocos días antes de su dormición, el Gérontas Jacobo escribió sobre la Cruz de madera de su celda: " Acuérdate Señor de tu siervo Jacobo el Hieromonje.








Escrito sobre la Cruz de su celda, conociendo de antemano su "partida"




 
 
El Santo acostumbraba a ver ángeles durante el transcurso de los Divinos Misterios. Una vez manifestó:
"Las personas somos ciegas y no vemos lo que ocurre en la iglesia durante la Divina Liturgia. Una vez estaba sirviendo y no pude hacer la Gran Entrada por lo que vi. De repente sentí que alguien me empujaba por el hombro y me guiaba hacia la santa prótesis. Pensé que era el salmista y me dije a mí mismo: "¿El bendito, tal irreverencia? ¿Entra por la Puerta Hermosa (puerta central) y me empuja?" Me di la vuelta y vi un ala enorme que el Arcángel había puesto sobre mi hombro, y que me estaba guiando para hacer la Gran Entrada. ¡Qué cosas asombrosas tienen lugar en el altar durante la Divina Liturgia! A veces no puedo manejarlo, así que me desmayo en una silla y, por lo tanto, algunos compañeros concluyen que mi salud está mal, pero no se dan cuenta de lo que veo y escucho. ¡Qué alas sobre esos ángeles, madre mía!"
 
 









 
La obediencia

- El "gérondas" Jacobo Tsalikes una vez confesó a una anciana y le puso un canon (norma) para que no comulgara durante tres años.
- "¿Por qué no comulgas?" preguntó el sacerdote de su parroquia.
- "El padre Jacobo me puso un canon", respondió ella. Ella también le dijo la razón.
Él dijo: - "No, abuela, no te preocupes. Es un monje analfabeto. Yo estoy formado y te deshago el canon. Ven el domingo para que pueda darte la comunión".
Pero cuando la abuela se acercó para comulgar, sintió que la santa cuchara estaba vacía y fría, y no entendió la Sagrada Comunión.
Este maravilloso evento se repitió durante dos domingos más, por lo que la mujer se preocupó y fue nuevamente al padre Jacobo.
"Hija mía", le dijo, "un canon no se puede deshacer. Debes cumplir el canon que te puse".

- En 1987 el padre Jacobo confesó a una niña, pero él le prohibió comulgar.
Luego ella fue a un obispo, quien le permitió recibir la Divina Comunión...

 




San Jacobo (Tsalikis) el Nuevo, en distintas situaciones en su santa vida.




 
 
Pero cuando se acercó para comulgar, la cuchara sagrada entró en su boca vacía.
Este extraño y milagroso acontecimiento se repitió otra vez, por lo que la niña se aterrorizó y, después de haberse arrepentido, fue a confesarse nuevamente con el padre Jacobo.

- "Cuando me comunico con la gente", decía el yérontas Jacobo, "nunca les miro a la cara. A veces, sin embargo, mis pensamientos me dicen que los mire. Luego veo algunas caras que tienen la forma de un perro, un mono u otro animal. La forma es aterradora. Pero también veo a algunos que están contentos y alegres que después de la Divina Comunión brillan como el sol ".

- "Hoy que has comulgado", le dijo a uno de sus hijos espirituales, "¿ves cómo te sientes? Así es como siempre me siento. Cristo siempre está en mí".*
 
 
 
 
 




Esta vida es pura inspiración para el atleta espiritual - San Jacobo de Evia (vídeo, inglés)


Primera vigilia en su honor (vídeo), del 17 al 18 de noviembre del 2017, diez días antes de que fuera oficialmente reconocido como Santo por el Patriarcado Ecuménico. Santo Templo de los Venerables Barnabé e Hilarión de la comunidad de Peristeronas de Morfu en Chipre, con la asistencia de su Eminencia el Metropolita de Morfu Sr. Neófito. 
 
 
 
 
 
 
 

 
 
Ἀπολυτίκιον Ἦχος α΄. Τῆς ἐρήμου πολίτης.
 
Λιβισίου τόν γόνον, καί Εὐβοίας τό καύχημα, ἐν ἐσχάτοις χρόνοις φανέντα, μοναστῶν φίλον γνήσιον, Ἰάκωβον τιμήσωμεν πιστοί,τόν νέον ἡσυχίας ἐραστήν, τὸν παρέχοντα ἰάσεις παντοδαπάς, τοῖς εὐλαβῶς κραυγάζουσι· Δόξα τῷ σὲ δοξάσαντι Χριστῷ, Δόξα τῷ σὲ θαυμαστώσαντι, Δόξα τόν ἐν ἐσχάτοις χρόνοις καί καιροίς σὲ ἁγιάσαντι.
 
Apolitiquio tono 1. Ciudadano del desierto.
 
La descendencia de Lebisi y el alarde de Eubea, aparecido en los últimos tiempos, amigo puro de los monjes, honremos los fieles a Jacobo, al nuevo amante de la hesiquia, al emisor de curaciones para todos, los fieles clamamos. Gloria a Cristo que te ha glorificado, gloria al que te ha hecho milagroso, gloria al que en los últimos años y tiempos te ha santificado.  


 

Otro apolitiquio tono plagal del 1º

El modelo de discernimiento y modestia, el maravilloso líder del Monasterio del Venerable David, que labraba y sembraba amor en los corazones endurecidos de las personas portadoras de Dios, oh Padre Jacobo. No descuides interceder con Cristo en nombre de aquellos que te invocan con fe.
 
 
 





Fuentes consultadas: saint.gr, johnsanidopoulos.com, pentapostagma.gr

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