EPISTOLA A LOS FILIPENSES

INTRODUCCION (Por P. Trempelas)


Filipos fue una ciudad de Macedonia cerca de la actual Kavala. Su Iglesia fue fundada por el apostol Pablo durante su segundo recorrido apostólico, alrededor del año 52 d.C., y fue la primera Iglesia fundada en Europa (Hech. 16,12). El 
apostol Pablo, que era acompañado por Silas y por Timoteo, se dirigió inicialmente a los judíos de Filipos. Primero fue atraída a la fe cristiana la "vendedora de púrpura" Lidia, la cual fue bautizada junto con todos sus familiares. 
Un día, Pablo sanó a una joven sierva que tenía un espíritu adivinador demoniaco en a ciudad de Filipos. Pero esto fue motivo para que Pablo fuese detenido, golpeado y encerrado en prisión junto con Silas. Su milagrosa liberación de las ataduras fue motivo para que el guardián de la prisión se uniese a la fe cristiana; fue bautizado junto con toda su familia. Los detalles del encarcelamiento de los dos apóstoles y los acontecimientos que siguieron podemos leernos en el capítulo 16 de los Hechos de los Apóstoles (16, 16-40).
La segunda vez que visitó el apostol la Iglesia de Filipos fue durante su tercer recorrido apostólico, alrededor del año 57 d.C. Y por tercera vez, cuando alrededor del final de este recorrido suyo regresó a Jerusalén. (Hech. 20,6) 
Esta epístola la escribió el apostol desde Roma durante el primer año de su primer encarcelamiento. Tomó la decisión de escribirla a partir de la enfermedad y la recuperación de Epafrodito, a través del cual enviaron los filipenses ayuda económica al apóstol. Entonces cuando Epafrodito se recuperó, el apostol Pablo le aconsejó regresar para que no se preocupasen los filipenses, los cuales estaban informados de la enfermedad del enviado (Fil. 2, 25-26). Con esta oportunidad el apostol escribió su Epístola a los Filipenses para expresar sus agradecimientos por haberle recordado, pero también para aconsejarles y darles mandamientos, teniendo como base las informaciones que hubo recibido de Epafrodito.   
   




EPISTOLA A LOS FILIPENSES



CAPITULO 1

Saludos

1. Pablo y Timoteo, siervos de Jesús Cristo, a todos los santos en Cristo Jesús que están en Filipos, junto con los obispos y los diáconos; 


2. que la gracia sea con vosotros y la paz de Dios nuestro Padre y del Señor Jesús Cristo.


Agradecimiento y alegría de Pablo

3. Siempre que me acuerdo de vosotros doy gracias a mi Dios, cuando os recuerdo


4. siempre en cada una de mis oraciones oro con alegría por todos vosotros,


5. por vuestra participación en la obra del evangelio desde el primer día hasta ahora.

  

6. Estoy convencido de esto: de que el que comenzó en vosotros la buena obra, la consumará hasta el Día de Jesús Cristo;


7. Es, realmente, acertado que piense así de todos vosotros, por cuanto os tengo en el corazón, a vosotros que sois participantes conmigo de la gracia en mis prisiones y en la defensa y confirmación del evangelio. 


8. Porque Dios me es testigo de que a todos vosotros os amo con el amor de Jesús Cristo.


9. Y esto pido en oración: que vuestro amor aumente más y más en perfecto conocimiento y en todo discernimiento, 


10. para que discernáis lo mejor, a fin de que seáis puros e impecables para el Día de Cristo,


11. llenos de frutos de justicia que son producidos a través de Jesucristo, para gloria y alabanza de Dios.



Consecuencias de su encarcelamiento

12 Quiero que sepáis, hermanos, que las cosas que me han sucedido, han ayudado más bien para el progreso del evangelio,


13. de manera que mis prisiones han sido célebres en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás, que estoy en prisión por Cristo, 


14. y la mayoría de los hermanos en el Señor, cobraron ánimo con mis prisiones y se atreven mucho más a predicar el logos sin temor.


15. Algunos, a la verdad, predican a Cristo por envidia y contienda; pero otros de buena voluntad.


16. Los que por disposición a la disputa predican a Cristo, no lo hacen por una disposición pura, sino porque piensan que añadirán aflicción sobre mí, el prisionero. 



Su gozo por predicar a Cristo

17. Pero los que predican por amor, lo hacen porque conocen que yo he sido establecido para la defensa del evangelio.


18. Pero, ¿qué importancia tienen estas cosas, sino que, de todas maneras, o por pretexto o por sinceridad, Cristo es predicado? Y en esto me gozo, y en el futuro me gozaré;


19. porque sé que esto resultará en mi liberación, por vuestra oración y la ayuda del Espíritu de Jesús Cristo, 


20. conforme a mi anhelo y esperanza, de que en nada seré avergonzado, sino que hablaré con un coraje tal, que como siempre, ahora también será magnificado Cristo en mi cuerpo, viva o muera.



Vida o muerte, ¿qué es preferible?

21. Porque para mí vida significa Cristo y muerte ganancia.


22. Pero si el vivir en el cuerpo me permite trabajar para la fructificación,  no sé qué prefiero.


23. Porque por las dos soy presionado: tengo el deseo de morir y de estar con Cristo, porque esto es mucho mejor;


24. pero permanecer en el cuerpo es más necesario para vosotros.


25. Estoy seguro de ello y sé que me quedaré y estaré entre todos vosotros, para vuestro gozo en la fe,


26. para que aumente vuestra jactancia en Cristo por medio de mí.


27. Solamente que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo, para que o sea que vaya a veros, o que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, combatiendo todos en un solo alma por la fe del evangelio,


28. y sin temer en nada a vuestros adversarios. Esto es para ellos ciertamente indicio de perdición, mas para vosotros de salvación y esto proviene de Dios.


29. Porque a vosotros os ha sido concedido hacer esto a causa de Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él,


30. teniendo la misma lucha que habéis visto en mí, y ahora oís que hay en mí.





CAPITULO 2

Llamada a la unidad

1. Por tanto, si hay algún estímulo cristiano, algún consuelo de amor, alguna comunión en el Espíritu, si alguna compasión y misericordia,


2. completad mi gozo teniendo el mismo espíritu, el mismo amor, un alma, un espíritu.  



Llamada a la humildad

3. Sin hacer nada con disposición a la contienda o a la vanagloria, sino con humildad, considerando a cada uno de los demás como superior a él.


4. Que no mire cada uno solamente por su propio interés, sino también por el de los demás.



El ejemplo de la humildad y del autosacrificio de Cristo

5. Que haya entre vosotros el mismo espíritu, el cual había también en Cristo Jesús,


6. el cual, aunque existía en forma divina, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse,


7. sino que se rebajó a sí mismo tomando la forma de siervo, hecho semejante a los hombres,

 

8. y estando bajo la forma y condición de hombre, se humilló a sí mismo haciéndose obediente hasta la muerte, y de hecho muerte en la cruz.

 

9. Por lo cual Dios también le ensalzó en el grado más alto y le dio un nombre que es superior a cualquier otro nombre,


10. para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y sobre la tierra, y debajo de la tierra;*

Y lo ensalzó, para que se postrara ante el nombre de Jesús toda rodilla con reverencia y respeto, y para adorarle, los ángeles celestiales y los hombres terrenales e incluso los espíritus malignos, que están en las profundidades, para someterse con temor y pavor ante su poder y gloria divinos. (imgap.gr)


11. y toda lengua confiese que Jesús Cristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. 



Que la salvación conforme el carácter  

12. Por tanto, amados míos, dado que siempre habéis mostrado obediencia, no sólo debido a que estaba presente, sino mucho más ahora en mi ausencia, con temor y pavor ocupaos en vuestra salvación,


13. porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad.*

* Dios, sin eliminar vuestra voluntad, crea entro de vosotros la buena voluntad, la decisión y la disposición, e incluso también os refuerza para ocuparos en vuestra salvación. (P. Trempelas)


14. Haced todo sin murmuraciones ni disputas,


15. para que seáis irreprensibles y honestos, hijos de Dios impecables en medio de una generación corrupta y pervertida, en medio de la cual resplandecéis en el mundo como estrellas. 


16. manteniendo sólidamente el logos de la vida, para que pueda gloriarme en el Día de Cristo, de que no he corrido en vano, ni en vano me he fatigado.


17. Y aunque sea derramado en libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe, me gozo y regocijo con todos vosotros.

* Pero incluso si derramase mi sangre como libación sobre el sacrificio que ofrezco a Dios como ofrenda (y esta ofrenda y este sacrificio míos son vuestra fe, la cual habéis adquirido con mi propia asistencia y la cual ofrezco como obra de santa adoración), me gozo por convertirme en libación; y me gozo junto con todos vosotros por el resultado de salvación que tendréis. (P. Trempelas)


18. Y asimismo gozaos y regocijaos también vosotros conmigo.



Timoteo 

19. Espero en el Señor Jesús enviaros pronto a Timoteo, para que yo también esté tranquilo al conocer vuestras novedades.  


20. pues a ninguno tengo del mismo ánimo, que tan sinceramente se interese por vosotros,


21. porque todos buscan sus propios intereses, y no lo que es de Cristo Jesús.


22. Conocéis su probado valor, porque como hijo a su padre ha servido conmigo en el evangelio.


23. Así que a éste espero enviaros, luego que yo vea cómo van mis asuntos;


24. y tengo confíanza en el Señor de que yo también iré pronto a vosotros.



Epafrodito

25. Pero consideré necesario enviaros a Epafrodito, mi hermano y colaborador y compañero de milicia, vuestro mensajero, y ministrador de mis necesidades,


26. porque él tenía gran deseo de veros a todos vosotros, y gravemente se angustió porque habíais oído que había enfermado.


27. Realmente, estuvo enfermo, a punto de morir, pero Dios tuvo misericordia de él, y no solamente de él, sino también de mí, para que yo no tuviese tristeza sobre tristeza.


28 Así que os lo envío más rápidamente posible, para que os gocéis al verle de nuevo, y sea aliviada mi tristeza yo esté con menos tristeza.


29. Recibidle, pues, en el Señor, con gran gozo, y estimad a este tipo de hombres,


30. porque por la obra de Cristo estuvo próximo a la muerte, exponiendo su vida para suplir lo que faltaba en vuestro servicio por mí.*

Y Epafrodito es digno de tal honor, porque por la obra de Cristo estuvo al borde de la muerte, despreció su vida y estuvo expuesto hasta el último peligro, para compensar lo que vosotros, a pesar de vuestra buena disposición, no me pudistes ofrecer, es decir, servirme como representante vuestro en Roma. (www.imgap.gr)





CAPITULO 3

Pequeño el valor de los privilegios exteriores

1. Por lo demás, hermanos, gozaos en el Señor. A mí no me es molesto el escribiros las mismas cosas, y a vosotros os proporciona seguridad.


2. Guardaos de los perros, guardaos de los malos obreros, guardaos de los mutiladores del cuerpo,


3. porque nosotros somos los verdaderos circuncidados, los que adoramos al  Espíritu de Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, no basando nuestra confianza en la carne.


4. Aunque yo podría tener confianza también en la carne. Si alguno piensa que puede tener confianza también en la carne,* yo puedo más.

*en sus ventajas y cualificaciones respecto de la ley en lo que atañe al cuerpo.


5. Fui circuncidado al octavo día, provengo del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, soy hebreo de hebreos; en cuanto a la ley, fariseo;


6. en cuanto a celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia que es en la ley, irreprensible.



El deseo de Pablo de ser uno con Cristo

7. Pero las cosas que para mí eran ganancia, las he considerado como pérdida por Cristo.


8. Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo y ser hallado en él,


9. teniendo la justificación proveniente no del cumplimiento de la ley, sino la que es dada por la fe en Cristo, la justificación que viene de Dios con la fe como base;


10. para conocerle a él y el poder de su resurrección, y tener participación en sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte,


11. con la esperanza de llegar a la resurrección de entre los muertos.


12. No que haya conseguido ya mi objetivo, ni que me haya hecho ya perfecto; sino que corro,* por si hago mío aquello, para lo cual fui también asido por Cristo Jesús.

* no sea que yo tome y retenga lo que Jesucristo me ha asido y me ha atraído a la fe. Y esta, en última instancia, será mi salvación en el cielo. (imgap.gr)

13. Hermanos, yo no tengo todavía la idea sore mí de que lo haya ya alcanzado; pero una cosa hago: olvido lo antiguo y avanzando hacia lo que está delante, 


14. corro hacia el final, hacia el premio de la llamada celestial de Dios en Cristo Jesús.


15. Así que, todos los que somos perfectos, pensemos de este modo y si otra cosa distinta pensais, también esto os lo revelará Dios.


16. Solo que, en aquello a que hemos llegado, sigamos una misma regla y tengamos el mismo comediento.




El ejemplo de Pablo a imitar.

17. Sed imitadores míos, hermanos,  y seguid el ejemplo de los que se comportan según nuestro modelo, tal como los tenéis. 


Enemigos de la cruz de Cristo.

18. Porque muchos, de los cuales os hablé muchas veces, y aun ahora me refiero a ellos con lágrimas, que son enemigos de la cruz de Cristo;


19. el fin de los cuales será la perdición, cuyo dios es el vientre, y cuya gloria es su oprobio, sus pensamientos están en las cosas terrenales.


20. Pero nuestra patria está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo;


21. el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que tome la misma forma que su glorioso cuerpo, por el poder con el cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas.




CAPITULO 4

Incentivaciones

1. Así que, hermanos míos amados y deseados, gozo y corona mía, estad así firmes en el Señor, amados.


2. Ruego a Evodia y ruego a Síntique, que sean de un mismo espíritu en el Señor.


3. Asimismo te ruego también a ti, compañero fiel, que las ayudes, porque lucharon junto conmigo en el evangelio, junto con Clemente también y los demás colaboradores míos, cuyos nombres están en el libro de la vida.


4. ¡Regocijaos en el Señor siempre! Repito, ¡regocijaos!


5. Vuestra indulgencia que sea conocida por todos los hombres. El Señor está cerca.


6. Por nada estéis afanosos, sino que sean conocidas vuestras peticiones por Dios mediante oraciones y súplicas, con acción de gracias.*

* Los cuales deben siempre deben ir acompañados de una expresión de gratitud y agradecimiento por los bienes materiales y espirituales que Dios nos da. (imgap.gr)


7. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.


8. Finalmente, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo querido, todo lo que es de buena fama; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad.


9. Lo que aprendisteis y recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto haced; y el Dios de la paz estará con vosotros.



Agradecimiento de Pablo por la amabilidad de los Filipenses


10. En gran manera me gocé en el Señor, porque ahora finalmente ha florecido de nuevo vuestro interés por mí; y también anteriormente teníais interés, pero os faltaba la oportunidad para declararlo.


11. No me refiero a que tenga escasez, pues he aprendido a estar agradecido con lo que tengo. 


12. Sé vivir con carencias, también sé tener abundancia; en cada caso y en todas las situaciones he aprendido el secreto, para estar saciado y para pasar hambre, así como para tener abundancia y para padecer necesidad.


13. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.


14. Sin embargo, bien hicisteis en participar conmigo en mi tribulación.


15. Y sabéis también vosotros, filipenses, que al principio de la predicación del evangelio, cuando partí de Macedonia, ninguna iglesia se comunicó conmigo para dar lo material y recibir lo espiritual, sino sólo vosotros,


16. pues aun a Tesalónica, una y otra vez, enviasteis ayuda para mis necesidades.


17. No es que busque vuestras ofrendas, sino que busco la ganancia, la cual surge cada vez más por vuestra cuenta.*

* sino que busco y me intereso por vuestro beneficio espiritual, la cual provendrá de esta buena obra para vuestra ganancia. (P. Trempelas)


18. Tengo lo que me hace falta e incluso más. Estoy lleno, habiendo recibido de Epafrodito lo que enviasteis; olor fragante, sacrificio grato, agradable a Dios.


19. Mi Dios, pues, cubrirá cada necesidad vuestra, conforme a sus gloriosas  riquezas  en Cristo Jesús.


20. Al Dios y Padre nuestro sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.



Salutaciones finales

21. Saludad a todos los santos en Cristo Jesús.* Los hermanos que están conmigo os saludan.

* Saludad a cada fiel que ha sido santificado con su comunión y su relación con Jesús Cristo. (P. Trempelas)   


22. Todos los santos os saludan, y especialmente los de la casa de César.*

*Os saludan todos lo fieles de la Iglesia de aquí de Roma, y particularmente los que pertenecen al personal de la casa del César. (P. Trempelas)


23. La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén.